Tras el emotivo recibimiento el pasado jueves por parte de familiares y compañeros a los agentes pacenses de la Policía Nacional que han estado destinado casi un mes en Cataluña, ayer fue el turno de la bienvenida oficial. La delegada del Gobierno en Extremadura, Cristina Herrera, recibió a los miembros de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) que han formado parte del dispositivo Copérnico, cuya labor en defensa de la unidad nacional y del orden constitucional reconoció.

Los agentes se desplazaron a Cataluña el 29 de septiembre, dos días antes de la convocatoria del referendo independentista, y regresaron a Badajoz el pasado 26 de octubre. Durante este tiempo, se han dedicado a realizar labores de vigilancia en edificios oficial de Barcelona y Lérida. El inspector jefe de la UPR, Manuel de la Paz, reiteró que, a pesar de las situaciones de tensión que han vivido las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad desplazados a esta comunidad autónoma, han sentido «un apoyo inmenso» por una buena parte de la sociedad catalana, incluso en los momentos más complicados como cuando fueron desalojados de un hotel en Pineda del Mar. Aunque reconoció que otros compañeros sí se han tenido que enfrentar a situaciones más difíciles, aseguró que la estancia de los agentes pacenses se han desarrollado de manera «tranquila y sin problemas de ningún tipo».

Sobre la posible vuelta de la unidad a Cataluña --el 80% de sus miembros han participado en este dispositivo contra el desafío independentista--, el jefe superior de la Policía en Extremadura, Miguel García-Izquierdo, señaló que, de momento, no hay ninguna directriz al respecto, pero que la UPR está preparada y dispuesta para incorporarse en el momento en el que se vuelvan a requerir sus servicios.

El pasado jueves, cuando regresaron a Badajoz, como ya recogió este diario, tanto los agentes como sus familias se mostraron orgullosos del trabajo realizado en Cataluña. Los policías reconocieron que había sido un mes duro por tener que estar alejados de los suyos, pero expresaron su satisfacción por haber cumplido con su deber. Los familiares fueron más críticos con el trato que habían recibido en Cataluña y también por la falta de cobertura que, a su juicio, habían sufrido a pesar de estar cumpliendo órdenes.

Lo que la delegada del Gobierno dijo en su encuentro con los agentes no trascendió pues, a pesar de que se había convocado a los medios de comunicación a este acto, una vez se realizaron las declaraciones previas ante los micrófonos, Cristina Herrera dio indicaciones para que se invitara a la prensa a salir de la sala antes de dirigirse a los policías de la UPR.