El sindicato USO lamentó ayer que el Ayuntamiento de Badajoz desoiga los requerimientos de la Inspección de Trabajo en relación a la necesidad de adoptar protocolos de acoso laboral, de acoso sexual y por razón de sexo. USO denunció la inexistencia de estos protocolos, que se confirmó en una reunión de la inspección con técnicos de Recursos Humanos. La inspección dio un plazo de seis meses, que según el sindicato, ha expirado a mediados de este mes «sin que se haya hecho absolutamente nada».