El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, alaba la labor que realizan los trabajadores y profesionales de los Centros de Atención a Menores (CAM) de la región, un trabajo y "empeño que merece admiración, ya que si no es posible sustituir a las familias, sí consigue que casi no se eche de menos a los padres".

Vara hizo estas declaraciones en el transcurso de su intervención durante el acto que servía de inauguración a las nuevas instalaciones del CAM San Juan Bautista de Badajoz, en el que destaca como estos profesionales "hacen de padres sin serlo para que los menores hagan una vida con normalidad y se sientan queridos", según recoge la agencia Europa Press

Sobre las nuevas instalaciones, el presidente extremeño señla que tanto el arquitecto como la constructora, ambos extremeños, hayan conseguido realizar un centro "parecido a como son nuestras casas", de forma que "podemos estar tranquilos de la cobertura que se da a los menores".

Además, Fernández Vara agradece la colaboración que la Junta de Extremadura recibe de la Fiscalía para "salvaguardar los supremos intereses de los niños", que, a su juicio, "es lo que más debe preocupar".

Por su parte, el alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, resalta la "satisfacción" porque el nuevo centro sea un edificio del siglo XXI con el que se logrará "resultados distintos a los de años anteriores" en colaboración con los Equipos de Familia dependientes de los Servicios Sociales Municipales de Badajoz.

A su vez, el fiscal Superior de Extremadura, Aurelio Blanco, subraya que en el reciente informe del Defensor del Pueblo, sobre irregularidades en centros de menores españoles, "no menciona ningún centro" de la región y que "tampoco se recogen estos hechos en los informes" que elaboran los fiscales extremeños sobre los trabajadores y centros de la Junta de Extremadura.

En este sentido, Blanco insiste en los "buenos resultados" que da la colaboración con la Junta extremeña, una coordinación que a su juicio debería tener una "ampliación con redes informáticas para poder ser más eficaces en los procedimientos de protección a los menores".

El nuevo edificio

El fiscal aclara que se trata de un centro "moderno adaptado a las necesidades de la labor que tiene que desempeñar", unas instalaciones que "son pioneras y serán referencia en la comunidad autónoma".

El nuevo centro está construido en una parcela, cercana a las antiguas instalaciones, de 10.183 metros cuadrados, de los que 3.967 están construidos bajo un diseño del arquitecto extremeño Luis Rico, y para el que la Consejería de Igualdad y Empleo ha destinado 3.294,172 euros.

Con este nuevo edificio se tiene, como en el anterior, se ofertan 78 plazas, de las que 49 están ocupadas en la actualidad, 30 en la unidad de niños de entre cero y seis años y el resto para los de 7 a dieciocho.

El nuevo CAM San Juan Bautista consta de tres zonas diferenciadas, una primera dedicada a infantil para los menores de cero a seis años con espacios para aulas de gateo; juegos; visitas o comedor, además de una zona de noche con diez dormitorios dobles para los usuarios, compartiendo baño cada dos, y un dormitorio para el técnico de educación infantil cerca de los chicos.

La segunda zona se dedica a hogares para chicos de seis a dieciocho años con baños, salón de actos y una zona residencial de seis módulos de viviendas, con cuatro dormitorios dobles, despachos de tutores, salas de estudio, un espacio donde cada vivienda se articula con un patio interior y un salón comedor con cocina incorporada.

La tercera zona se dedica a talleres y aulas en un espacio de 702 metros cuadrados, con un patio interior y galerías donde se ubican gimnasio; salas de tele; salas de terapia y los talleres de audiovisuales, informática o manualidades.

Para este centro se cuenta con un grupo de 79 profesionales, de los que 15 son educadores sociales, 31 técnicos de educación infantil, 33 profesionales de categorías de ordenanza, cocina o limpieza y una coordinadora.

Tanto el centro como sus profesionales se marcan como objetivos promover la normalización de la vida de los menores; intervenir en cada menos de forma individual; estimular su desarrollo integral; promover actividades alternativas a la institucionalización, preferentemente de tipo familiar y fomentar la solidaridad y la sensibilidad hacia los problemas de la infancia.

Actualmente, la red del Sistema de Protección de Menores de la región da asistencia a 776 niños, de los que 537 están tutelados, 191 bajo guarda y el resto son mayores de edad que por distintas situaciones legales aún están bajo la tutela de este sistema.

Estos menores están acogidos y atendidos en un total de ocho centros, cuatro en la provincia de Badajoz y otros tantos en la cacereña.