El presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, considera que los viveros de empresas se presentan como nuevos recursos para introducir la "cultura del empleador que genera puestos de trabajo y nuevos proyectos empresariales en el corazón de las ciudades extremeñas". Así, se expresa durante la inauguración del primer vivero de empresas que la Cámara de Comercio de Badajoz crea en la capital pacense, segundo de la región de este tipo tras el de Plasencia. Según recoge la agencia Europa Press, Fernández Vara destaca la importancia del acompañamiento que estos viveros, y los servicios que ofrecen, tienen en los primeros pasos de los jóvenes emprendedores para lograr "transformar una idea en un proyecto competitivo con cualificación y formación", de forma que el empresario se convierte "en colaborador necesario para el crecimiento regional". Fruto de esta colaboración entre Administraciones Públicas, instituciones como las Cámaras de Comercio y la iniciativa empresarial, se debe iniciar un camino de colaboración, matiza Vara, en el que se "sumen iniciativas para mejorar el futuro extremeño de forma notable", ya que la suma de proyectos dará como resultado "una fortaleza doble". El vivero pacense es un edifico de 600 metros cuadrados, distribuidos en dos plantas, en la barriada de Valdepasillas de Badajoz, donde se ofertan a los nuevos empresarios un total de 23 despachos, con los que la Cámara de Comercio pacense espera dar cobertura a más de 30 empresas. Esta acción de la Cámara de Badajoz culmina el denominado Plan de Expansión, puesto en marcha en la pasada legislatura, por el que se han abierto delegaciones camerales en Don Benito, Villanueva, San Vicente de Alcántara y Almendralejo, además de 5 antenas de proximidad en Llerena, Jerez de los Caballeros, Zafra, Castuera y Montijo, con el objetivo de descentralizar y acercar los servicios a todas las localidades pacenses. Además del vivero de Badajoz, la cámara abrirá otros en las localidades de Mérida, Azuaga, Villafranca de los Barros y Don Benito, con un presupuesto total de 3'5 millones de euros, de los cuales INCYDE aporta, a través de los fondos FEDER, el 70 por ciento y el resto la Cámara desde fondos propios no comunitarios. La Cámara de Comercio diseña los viveros como espacios donde los nuevos empresarios encuentran, al inicio de la puesta en marcha de su proyecto, una ubicación, formación, financiación, tutorización en los dos primeros años e interconexión con la red nacional de viviros, puestos en marcha en toda España. Esta red de viveros, la más grande de Europa, se desarrolla entre INCYDE y las Cámaras españolas, con una red de más de 100 centros, de los que el 60 por ciento está ya operativo, desde la que los "viveristas" están conectados para el intercambio de información, negocios o exportaciones conjuntas de productos. El objetivo de estos centros es fortalecer la consolidación y arranque de nuevos negocios, generar empleo, diversificar el tejido productivo y la innovación y contribuir a la dinamización de las zonas donde se ubican. Para ello ofrecen servicios como aulas formativas, despachos, asesoramiento jurídico, subvenciones y formación, entre otros para lograr la consolidación del nuevo proyecto.