Las obras que el Ayuntamiento de Badajoz está realizando en la barriada de Antonio Domínguez, con fondos del Plan E, para renovar el acerado han sido la causa de la caída sufrida por José Maria Cotrina, vecino de la calle Pimienta, como él explica, y por la que ayer presentó una denuncia contra el consistorio.

Con motivo de la obra el acceso las aceras están levantadas y los vecinos acceden a sus viviendas y negocios mediante tablas de madera que las unen con la calzada. Como explica María, mujer de José María Cotrina --de 62 años--, en su caso esa tabla no estaba colocada porque "al encargado de la obra no le dió la gana ponerla, porque decía que aquí no vivía nadie".

Esto hizo que, el pasado jueves, su marido, al volver de hacer la compra, sufriera una caída intentando al intentar sortear la zanja abierta en su puerta. El golpe le provocó magulladuras en brazos, nuca y cara, por lo que José María tuvo que acudir a un médico "con la boca todavía dolorida y sin poder hablar", como explica su mujer.

Con ese parte médico en la mano el matrimonio vecino de Antonio Domínguez acudió ayer a poner una denuncia, "porque no hay derecho a que estén haciendo un arreglo así", en el que, según María, las aceras están quedando más altas en unas partes que en otras, la calzada tiene desniveles y a algunas cocheras no se puede acceder con los nuevos bordillos. "Nosotros también pagamos nuestros impuestos y tenemos derecho a que las cosas estén bien hechas y sin ser peligrosas", reclamó María.