Los vecinos de la barriada del Cerro de San Miguel se quejaron ante EL PERIODICO de que el vertedero que hay enfrente de sus casas supone un foco de infección para todos los que residen allí.

Sólo un pequeño camino separa los escombros de las primeras casas y el mal olor que produce y los bichos que cría son problemas con los que conviven estos vecinos desde hace ya varios años. "Aquí te hechan de todo, desde pescados, tomates, fruta podrida...", se quejó Amelia Tinoco, presidenta de la asociación de vecinos del Cerro de San Miguel.

TERRENO PRIVADO

Este terreno está sirviendo como vertedero desde hace muchos años, por lo que los habitantes del barrio están preocupados por la imagen que da a la zona de cara a los visitantes y porque se sienten impotentes al no poder evitar que la gente deje de arrojar basura "en la puerta de nuestras casas", manifestaron.

Aunque son conscientes de que, al ser un terreno privado, no puede evitar que se cierre o se traslade a otro lugar, Tinoco afirmó que una solución sería que limpiasen el lugar a menudo o que pusieran vigilancia en la zona para evitar el arrojo de desperdicios. Ellos, por su parte, ya han denunciado a varias personas que tiraron basuras, apuntando la matrícula del coche y que no han aparecido más por allí.

Paradógicamente, el incendio que sufrió el lugar hace unos días ha librado a los vecinos de la mayoría de las inmundicias que estaban tiradas allí. Las llamas han quemado basura, pasto, matorrales y bichos, sin embargo, los habitantes del Cerro piensan con preocupación en la llegada de las primeras lluvias y en la vuelta de las vacaciones.