Los vecinos de Los Colorines salieron ayer por primera vez a la calle para reclamar a la Junta de Extremadura que se les tenga en cuenta en el proceso iniciado para la recuperación integral del barrio, así como en los realojos de familias que están en estudio.

Una treintena de personas, integradas en la Plataforma de Vecinos de Los Colorines, que preside Antonio Chacón, se manifestaron a las puertas de la sede de los Servicios Territoriales de la Agencia Extremeña de la Vivienda, donde exigieron a la agencia que reconozca a esta plataforma y a su presidente como interlocutores válidos en el citado proceso, así como que "haya transparencia en el proceso".

El portavoz del colectivo denunció que desde la Agencia de la Vivienda se está intentando disolver esta plataforma que se ha constituido legalmente y representa a 40 familias de Los Colorines. En este sentido, Antonio Chacón apuntó a Paloma Castellanos, asesora del presidente de la agencia, Javier Corominas, que, según señaló, "está animando a cada uno de sus integrantes para que se desvinculen de la plataforma". Por ello, se preguntó "quiénes son ellos para impedir la entrada de una persona, como presidente de una plataforma de vecinos, en lugares como la oficina de la vivienda".

Antonio Chacón señaló que "intentan desunirnos porque para ellos es más fácil trabajar individualmente con cada vecino", sin embargo recordó que nadie prestó atención a las reivindicaciones de Los Colorines hasta que se unieron para hacerse oír.

Según explicó, Javier Corominas expresó el mes pasado, durante una reunión con Antonio Chacón y con el representante de la otra plataforma vecinal existente en el barrio, Ricardo Cabezas, que no existirían estas dos agrupaciones, sino un solo grupo de trabajo del que formarían parte dos miembros de cada una de ellas.

Pero Antonio Chacón aseguró que no ha sido recibido en la Agencia de la Vivienda y denunció el trato de favor, que, en su opinión, está recibiendo la otra plataforma. Por ello, anunció que continuarán con las concentraciones ante las tres administraciones implicadas.

El portavoz de IU en el Ayuntamiento de Badajoz, Manuel Sosa, que se unió a los vecinos, manifestó su sospecha de que la Junta pretende evitar cualquier control externo sobre lo que se quiere hacer.

Por su parte, la Agencia de la Vivienda manifestó, a través de una nota, no entender la protesta al considerar que "no va acompañada de una reivindicación real" y recordó que tras dos reuniones mantenidas con las plataformas se están llevando a cabo los acuerdos adoptados.