Los vecinos de la urbanización Las Lomas, en la carretera de Sevilla, están dispuestos a no pagar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) al Ayuntamiento de Badajoz si no cuentan con servicio de autobús urbano, que llevan meses reclamando, sin que hayan recibido respuesta por parte del concejal responsable, José Antonio Monago. Su intención es plantear una demanda y depositar en el juzgado sus impuestos.

Una representación de la junta directiva se reunió en octubre con Monago para plantearle sus reivindicaciones y, según aseguran, el concejal les señaló que la solución no se podría abordar antes de final de año pero que "la veía muy factible", según cuenta José Caballero, presidente de la comunidad de vecinos de Las Lomas. En aquella reunión el concejal planteó que el servicio no sería continuado sino solo a las horas de mayor demanda, con lo que discrepan los potenciales usuarios. Pocos días antes de aquel encuentro presentaron un escrito en el ayuntamiento, alertando del problema de la estrechez de la carretera, que además carece de aceras y solicitando el transporte urbano, como prueba de que, si algún día ocurre algo, consta por escrito que habían avisado.

Las Lomas es una urbanización privada y, por ejemplo, la recogida de basura es interna y luego el servicio municipal la retira a la entrada. Para sus habitantes disponer de servicio público de autobús es prioritario, para que lo puedan utilizar sus hijos y, fundamentalmente, para las empleadas de hogar, que suben y bajan andando por un camino que además no está iluminado. La parada más cercana está en Portero Escobar y tienen que recorrer kilómetro y medio.

Los vecinos creen que la solución es sencilla, pues se trata de alargar un kilómetro y medio la línea 4, que viene desde Cerro de Reyes por el nuevo puente, entra en Suete de Saavedra y en San Roque y llega hasta la plaza de la Libertad. La propuesta es que esta línea suba hasta la entrada de Las Lomas y dé la vuelta arriba, en los Montitos, con lo cual también se beneficiarían los vecinos de esta urbanización. Entre ambas suman unos mil habitantes.

La posibilidad de dejar de abonar la contribución es una idea que ha surgido en la junta directiva, que aún no se lo ha trasladado a la asamblea de propietarios, "pero estamos dispuestos a hacer todo el ruido que podamos, porque nos da la sensación de que están pasando olímpicamente de nosotros", señala José Caballero, quien apunta que "no podemos ser ciudadanos de primera a la hora de pagar y ciudadanos de quinta o de sexta para recibir servicios". En este sentido, asegura que hay propietarios que están pagando "una barbaridad" en concepto de IBI, hasta 900 euros de contribución, "para que no tengamos ni autobús en la puerta".

En esta urbanización hay 72 viviendas unifamiliares y ya se está construyendo una segunda fase, Las Lomas II. Caballero señala que debido a esta obra el trasiego de camiones en estos momentos es continuo y no hay problemas cuando se cruzan los vehículos en la carretera, por lo que no entiende que esa pueda ser la excusa para no llevar hasta allí el autobús. Esta urbanización se creó en 1996 pero hasta julio del 2007 el ayuntamiento no ha concedido las licencias de ocupación. La situación de Los Montitos es distinta, pues las calles todavía no han sido recepcionadas.