Los vecinos de San Roque no quieren que se dilate en el tiempo la reapertura del Centro de Ocio Contemporáneo (COC), por eso urgen al Ayuntamiento de Badajoz que agilice el proceso para sacar a concurso la gestión de este espacio cultural de la avenida Ricardo Carapeto, cerrado desde el pasado mes de diciembre.

«Antes de las elecciones tuvimos una reunión con la exconcejala de Cultura, Paloma Morcillo, y nos aseguró que se iba a abrir, pero desde entonces no sabemos nada más, solo que sigue cerrado», lamentó el presidente de la Asociación de Vecinos de San Roque, Ramón Olivenza, quien mostró su temor de que ocurra como con el albergue juvenil El Revellín, sin actividad desde hace 21 meses y cuya licitación sigue pendiente de que Patrimonio dé el visto bueno al nuevo pliego de condiciones. «Tenemos dos centros importantes cerrados en el barrio y nadie da ningún plazo», se quejó el representante vecinal, quien insistió en la necesidad de ambos se reabran «cuanto antes».

El COC de San Roque echó el cierre a finales del 2018, después de que no se prorrogase el contrato a su anterior gestor, que había explotado las instalaciones desde su apertura en el 2006. Entonces, desde la Concejalía de Cultura se informó de que se estaban elaborando los pliegos de condiciones para sacarlo a concurso público, pero no se dio una fecha concreta para su reapertura. Este diario solicitó información al ayuntamiento sobre en qué punto se encuentra ese pliego y que plazo se maneja para que estas instalaciones vuelvan a tener actividad, pero no obtuvo respuesta.

El pasado mes de marzo, la entonces concejala de Cultura aseguró que se seguía trabajando en el pliego de condiciones y que desde este área ya se habían definido algunos de los requisitos que debería cumplir el adjudicatario, pero que se estaba a la espera de que el servicio de Patrimonio determinara las condiciones económicas y administrativas. Aún no se había decidido si el contrato sería una concesión convencional o se apostaría por una gestión mixta, como en el caso del albergue juvenil. Si se tenía claro que la empresa que explote en el futuro el Centro de Ocio Contemporáneo deberá presentar una programación cultural completa, en la que se preste espacial atención al público infantil y juvenil.

Asimismo, el adjudicatario tendrá que reservar días en las instalaciones para que el ayuntamiento pueda realizar actividades propias, un requisito que ya se estableció en el contrato con el anterior gestor pues, hasta su cierre, el COC era sede del Cineclub de Badajoz, que promueve la Concejalía de Cultura y que se ha trasladado al teatro López de Ayala la última temporada. También correrá por cuenta de la empresa equipar la sala de proyecciones.

TRECE AÑOS / Tras 13 años de funcionamiento, el Centro de Ocio Contemporáneo echó el cierre cuando no se renovó el contrato de alquiler del local entre el ayuntamiento y el empresario que lo gestionaba desde su apertura. La situación provocó un cruce de declaraciones entre ambos, pues el primero alegaba que era el consistorio el que se había negado a volver a firmar el contrato por un plazo que permitiera dar viabilidad al proyecto, mientras que la Concejalía de Cultura alegaba que esa petición, según habían constatado los servicios municipales, no se ajustaba a la ley. Por eso, lo que se le ofreció fue renovar por un año mientras se elaboraba el nuevo pliego de condiciones, opción que la empresa rechazó.

Después de que se anunciara el cierre del COC, más de un centenar de personas se concentraron a sus puertas través de una convocatoria espontánea realizada en las redes sociales para protestar y exigir que no se cerrase este espacio. Entonces, el Ayuntamiento de Badajoz aseguró que su voluntad era que el Centro de Ocio Contemporáneo mantuviese su uso cultural en el futuro, para lo que mantuvieron esa reunión con la Asociación de Vecinos de San Roque con el objetivo de conocer de primera mano las inquietudes del barrio de cara a la reapertura de las instalaciones que, de momento, sigue pendiente de fecha.