Los vecinos afectados por el incendio del bloque de viviendas de Suerte de Saavedra el 30 de enero pasan su segunda noche a la intemperie, ya que consideran que sus viviendas no reúnen las condiciones de salubridad suficientes para volver.En declaraciones a la agencia Europa Press, el coordinador regional de IU, Pedro Escobar, asegura que los vecinos se encuentran "desanimados" tras comprobar por segunda noche consecutiva que sus reclamaciones no son atendidas por la Junta de Extremadura, como institución responsable de estas viviendas sociales. "La gente tiene mucho frío y está muy cansada", comenta Escobar, que acompañó a los afectados, lo que está provocando que el grupo empiece a disgregarse y que "cada uno vaya a lo suyo". Según comenta, estos pisos no están en condiciones habitables porque "hay mucho hollín, huele horrible, y no se pueden usar los baños", debido a que los bajantes han sufrido desperfectos de tal forma las aguas fecales están pasado de una vivienda a otra. En este incendio, originado en uno de los garajes de las viviendas ubicadas en la plaza de Miguel Delibes, se vieron afectados 3 bloques de protección oficial construidos por la Junta de Extremadura, y por el que fueron evacuadas todas las familias afectadas. Hasta la fecha han podido volver a sus hogares las familias con seguro de dos de los bloques afectados, mientras que el resto y los inquilinos del bloque 2 permanecen en hoteles pagados por la Consejería de Fomento, quien además se responsabilizó de la limpieza de las zonas comunes de los edificios afectados. Así, el jueves se certificó, por parte de las empresas contratadas por la Junta extremeña, que no había riesgo en las estructuras del bloque afectado, garantizando la seguridad y su habitabilidad. Sin embargo, el problema surge las familias que carecen de seguro, que son cinco del bloque 2 y otras tantas del resto de bloques afectados, ya que no cuentan con medios para la limpieza. Escobar destaca que esta misma mañana se presentaron en estas viviendas dos operarios enviados por la Junta de Extremadura, y que al intentar reparar lo bajantes de las viviendas "ha salido porquería a espuertas", por lo que los empleados, impotentes ante la magnitud de los desperfectos que sufren las instalaciones afectadas por el incendio, se han visto obligados a retirarse del lugar sin realizar su tarea. El líder regional de IU reitera que la Junta de Extremadura se ha precipitado al retirar las ayudas establecidas a los vecinos para el alojamiento en hoteles mientras se reparaban los desperfectos, después de que la administración ordenara la vuelta de los propietarios a sus casas, al considerar que "no existe riesgo alguno que impida la vuelta a la normalidad".