En su primera rueda de prensa en la oposición municipal tras las elecciones, el portavoz socialista, Celestino Vegas, reiteró ayer una denuncia que ya realizó en la legislatura que acaba de expirar, relativa a la deuda del ayuntamiento con los proveedores, a los que según el PSOE no se les paga a los 45 días, como defiende el equipo de gobierno, sino que el periodo de cobro es superior a 120 días.

En este sentido, Vegas también criticó que este retraso en el pago esté provocando que haya que pagar intereses de demora a aquellos que los reclaman (cuando pasan más de 60 días). Según el portavoz del PSOE, solo las grandes empresas acuden a la vía judicial, porque los pequeños proveedores temen que el consistorio pueda dejar de trabajar con ellos. Siendo así, según los datos que aportó, en los últimos siete meses el ayuntamiento ha tenido que abonar más de 900.000 euros en intereses de demora, una cuantía que calificó de "auténtica barbaridad".

Asimismo, el concejal socialista cuestionó que el PP pueda cumplir su promesa electoral de reducir la deuda municipal un 30% y pagar a los proveedores a los 30 días y al mismo tiempo cumplir las inversiones comprometidas, pues solo puede hacerlo si recurre al endeudamiento o sube los impuestos.