El portavoz municipal socialista, Celestino Vegas, se mostró ayer muy crítico con la gestión realizada por Miguel Celdrán, sobre todo desde el punto de vista económico y del urbanismo y lo acusó del abandono de los barrios, la desactivación del movimiento vecinal y de "haber negado el pan y la sal" a la oposición. Vegas quiso salir al paso de "tanto elogio que ha recibido y tan escasísima crítica porque casi nadie habla mal de don Miguel, todo lo ha hecho perfecto", aunque sí reconoció que "su mayor éxito ha sido no cometer errores graves y si los hubo los escondió con una habilidad del que fue cocinero antes que fraile".

En materia económica, el portavoz socialista recordó que Celdrán hizo bandera del endeudamiento que se encontró al llegar y "se va dejándolo más endeudado que cuando lo cogió". Según sus datos, la deuda ha pasado de 11.000 millones de pesetas a 12.000. En cuanto a los impuestos, señaló que solo el agua desde el 95 se ha incrementado el 240% y el equilibrio financiero de Tubasa y Aqualia ha ido creciendo "día a día", aludiendo además a la mala gestión de FS con la recaudación.

En Urbanismo "ha tenido más sombras que luces", según Vegas, que se refirió a "recalificaciones dudosas, favores a amigos y enriquecimiento poco honroso" y a que las principales obras de la ciudad se han financiado con fondos de otras administraciones. En cuanto a los servicios, aseguró que "dejó hundir" la limpieza de la ciudad para justificar su privatización. Por otro lado, recordó que Celdrán se va sin comisaría ni jefe de la Policía Local, ni de los bomberos, sin presupuestos para el 2013 y sin piscina en la Margen Derecha, sin resolver el problema del Cubo de Biblioteconomía y sin abrir el párking de Conquistadores,

Por otro lado, Vegas insistió en que la marcha de Celdrán obedece a una estrategia electoral y cuando la prensa le comentó que también en el PSOE se producen estos relevos (así ocurrió con Gabriel Montesinos en la legislatura de Manolo Rojas), respondió que "por eso perdimos las elecciones".