El servicio municipal de Parques y Jardines deberá reponer entre 20 y 25 árboles dañados por el vendaval del fin de semana. Lo primero que ha hecho el servicio es retirar aquellos que suponen algún riesgo y en los próximos días se retirarán todos, según explicó ayer la concejala del área, Cristina Suárez Bárcenas. Los árboles se irán reponiendo a medida que haya disponibilidad en el vivero municipal y cuando llegue la época de trasplante.

Una de los zonas más afectadas ha sido la alcazaba. Se han partido cinco pinos y las ramas cayeron en el acceso a Biblioteconomía, también se cayó una farola y se ha partido por la mitad una palmera, cuya reposición puede costar unos 1.800 euros, según Suárez Bárcenas.

En el parque de Castelar, en la zona junto a los servicios públicos, una casuarina se partió a metro y medio del suelo y en su caída rompió otro árbol que, a su vez, se llevó una farola por delante. En el parque de San Fernando se partió por la base un olmo del interior, toda la hilera de los árboles próximos al centro de salud perdieron ramas, y del lado contrario. Cerca de allí, en la calle Valladolid se cayeron ramas de arces y en la mediana de carolina Coronado se partió un olmo de bola entero, que se retiró tras trocearlo.

En Valdepasillas se partió por abajo una melia, una mimosa en Tomás Romero de Castilla, un cedro en la calle Alconchel, una acacia de Alcaraz y Alenda, un brachichito entero en Damián Téllez y una melia de raíz en Antonio Montero. En el poblado de Alcazaba se ha troceado un ciprés gigante que se había caído.

Por otro lado, la concejala informó de que desde mayo pasado se ha reducido a la mitad el agua empleada en el riego de zonas verdes como medida de ahorro por la sequía.