La Policía Nacional detuvo el lunes a un joven por vender a través de internet un teléfono móvil que previamente había comprado a un desconocido a pesar de saber que era robado. La investigación se inició con la denuncia del dueño del terminal por robo del mismo. Otro joven se personó después en comisaría para denunciar que había comprado un teléfono por internet y que al intentar liberlarlo comprobó que era robado. Las averiguaciones llevaron hasta el detenido, acusado de un delito de receptación.