La creatividad y la improvisación volverán a ser las marcas distintivas de una nueva edición del Festival de Jazz de Badajoz, que se celebrará del 9 al 13 de noviembre con un cartel que combina veteranía e innovación reuniendo en la capital pacense "lo mejor del jazz contemporáneo y estrellas consagradas", según destacaron ayer los organizadores durante la presentación.
En su 23 edición, el festival vuelve a elegir tres escenarios: el teatro López de Ayala, donde habrá cinco conciertos; la sala Mercantil, para las jam session ; y el Conservatorio Superior de Música, que acogerá el tercer Seminario Internacional de Badejazz.
La cantante Gretchen Parlato, ganadora del concurso más importante de jazz del mundo y considerada una de las artistas más originales de la escena actual, abre los conciertos del López de Ayala el día 9. Esta será su única actuación en España.
El día 10 se subirá al escenario Kurt Rosenwinkel, que visitó el festival como estrella emergente hace 9 años y que repite convertido en "una de las voces más importantes del jazz" y uno de los músicos más influyentes en este estilo.
Christian Scott, a quien algunos críticos señalan como el nuevo Miles Davis, actuará el día 11; y el guitarrista Stanley Jordan, con una particular manera de tocar que asemeja el sonido de su guitarra al piano, lo hará el día 12. El ciclo lo cerrará el sábado Jonathan Kreisberg, "una de las voces más importantes del jazz contemporáneo".
Los conciertos serán a las 21.00 horas y la entrada costará 10 euros (5 para los alumnos del seminario).
En la sala Mercantil, cada día (23.30 horas) un grupo ofrecerá un concierto antes de las jam session , donde músicos y profesores y alumnos del seminario se unirán en el escenario. Actuarán las bandas de Juan Galiardo, Arturo Serra y Narciso González.
Pablo Romero y Javier Alcántara, de la Asociación Badajazz organizadora del festival, presentaron el festival acompañados por Damián Beneyto, de la Consejería de Cultura, el director del López, Miguel Murillo, y Guillermo Valera, del Gabinete de Iniciativa Joven. Todos coincidieron al destacar la "calidad" del festival, una cita ya consolidada que ha situado a la capital pacense en un lugar preferente en el mapa del jazz.
