"Todo aquel acto con maldad, vileza o mentira". Esa es la definición de la palabra infamia, título que da nombre al primer disco de rap de Felipe Rivera Torres publicado en edición online el pasado 17 de julio. El artista utiliza este nombre con un tono reivindicativo, como "un golpe en la frente para muchos cuando lo escuchen", asegura.

El joven, de tan sólo 18 años, con aspiraciones a estudiar biología, afirma que ha sido un trabajo "muy difícil" porque son muchas personas de diferentes sitios las que participan, pero que sin duda "ha sido una experiencia muy grata que volvería a repetir. Es más, estamos pensando en cosas nuevas para el próximo año", añade.

Luysfe, como así le conocen todos sus amigos, trabaja en solitario en este mundo de la música, aunque reconoce que siempre tiene detrás el apoyo de su hermano 'Fransik' y 'Savy'. "Digamos que no dependo de nadie, pero hay muchísima gente detrás para los instrumentales", comenta.

Admite que se ha sentido interesado por la música desde siempre, pero que fue en 2005 cuando empezó a gustarle este mundo del hip-hop. "Antes no estaba extendido, y ahora parece que todo el mundo lo conozca. Una vez por la calle un niño pequeño me paró y me dijo que era su ídolo", expresa como anécdota.

Las canciones de rap, compuestas por él mismo, constituyen una vía de canalización de las situaciones malas que le ocurren a diario. "Me gusta el rap porque es un estilo de música en el que puedo expresar mis ideas sin que nadie me tache, pero no tengo un estilo concreto aunque la gente lo califica como underground ", explica.

En este sector musical tan particular reconoce haber tenido mucho apoyo por parte de su familia y amigos, aunque "las madres siempre son más reticentes a este estilo porque tienen la imagen de negros americanos, rollo pistoleo y drogas". Sin embargo, no tardó en darse cuenta de que esto no es igual que en las películas", manifiesta.

Internet ha sido una gran plataforma de promoción, ya que su disco no se encuentra en soporte físico. La intención inicial del pacense ha sido hacer un disco de ámbito local, "para mi gente de siempre", explica. Aunque cuenta, que en distintos puntos de la península ya le escuchan, y que si fuera necesario, haría algunas copias en soporte físico.

A la repuesta de cuáles serían dos razones para escuchar el disco, el joven asegura: "escribo, canto y todo lo que digo es verdad sin necesidad de buscar el lucro. Además, es un disco que está hecho con muchísimo trabajo".

Pensando en un futuro próximo, el extremeño tiene claro que la música es más un hobby que una profesión. "No la busco como trabajo en un futuro, no me llama tanto la atención como para dedicarme a ello a fondo, pero si por circunstancias de la vida todo me va mal, ojalá sea ella la que me dé el sustento para poder vivir".

De momento no tiene pensado organizar un concierto, ya ofreció uno cuando presentó su nuevo disco. Ahora prefiere descansar después de duros meses de estudios. Y es que ya se sabe, "a veces es necesario perder tiempo para ganarlo después".