"Soy Martínez Singul y, desgraciadamente, soy conocido por esto". A lo que se refería es a las múltiples violaciones y agresiones sexuales por las que fue condenado en 1993 a 65 años de prisión. Este hombre calvo, sin afeitar y vestido de sport fue juzgado ayer por intentar agredir sexualmente el 10 de mayo a dos mujeres en los alrededores del Hospital Clínic de Barcelona. El imputado repitió una y otra vez que es inocente, pero una víctima le reconoció sin dudar en la sala de vistas como la persona que le persiguió por la calle y quiso entrar en su portal. "Parece que haya un interés por hacerme pagar más por lo que hice, por mis antecentes, de los cuales me arrepiento", aseguró el acusado. "¿Siente que despierta rechazo social", le preguntó su abogado defensor. "Sí. Es normal, porque lo que hice en su día es grave", reconoció.