El azud revivió ayer con el Encuentro Hispano-Portugués de Hidroaviones Radiocontrolados, en el que participaron 46 aficionados inscritos, de España y Portugal, y que reunió junto a este punto del río a cientos de pacenses deseosos de contemplar el espectáculo.

En el cielo el tamaño perdía sus referencias y las acrobacias y vuelos rasantes que levantaban el agua arrancaban aplausos. Entre los aparatos convocados había helicópteros, aviones eléctricos, con motor de explosión, canoas, barcas, lanchas, "todo lo que pueda tener dos patines para deslizarse en el agua", comentaba junto a la orilla el presidente del Club Pacense de Aeromodelismo, Juan Sixte.

Uno de los momentos más expectantes fue el despegue fallido de la maqueta de un hidroavión real, que se utilizaba en la Primera Guerra Mundial, una de las más espectaculares del encuentro, porque se trataba de una reproducción exacta a escala. También había un Plus Ultra, reproducción del primer español que atravesó el Atlántico a principios de siglo.

El lugar, "fantástico". Sixte agradeció al ayuntamiento la limpieza integral de la zona, para disfrute de aficionados, pescadores y piragüístas, y señaló que es una manera de rescatar el río.

De hecho, este club está barajando la posibilidad de trasladar su actividad al Guadiana, para lo cual necesitaría adquirir una zodiac con la que rescatar los aparatos. Los socios se reúnen todos los domingos, bajo un sol estival de justicia, en el kilómetro 18 de la carretera de Valverde.