Ya existe acuerdo para traspasar la mitad de la plantilla de Inmuba al Ayuntamiento de Badajoz

El recorte de la plantilla es una de las medidas previstas por el equipo de gobierno para hacer viable la subsistencia de la empresa pública. El traspaso afecta a 8 de los 15 trabajadores de Inmuba, que se quedará con 6 y el gerente. Los ocho empleados se trasladarán al servicio de Patrimonio, por la necesidad que existe en el ayuntamiento de dotar de personal un área con competencias relativas al inventario y control del patrimonio municipal. En Patrimonio permanecerán un mínimo de dos años. Fuentes consultadas aseguran que los trabajadores de Inmuba afectados por el traslado están satisfechos. Desde el inicio, querían evitar el despido.

El proceso de transmisión se ha alargado en el tiempo. Este diario tuvo acceso en enero a la memoria explicativa de los motivos para la transmisión del personal de Inmuba al ayuntamiento, que reconocía que la crisis económica «ha incidido de forma especial» en la acción promotora de viviendas de este empresa pública, que era su principal actividad. El equipo de gobierno asumió que la viabilidad de la empresa está comprometida si continuaba manteniendo una plantilla de 15 personas, de ahí que propusiese la transmisión, para salvar los puestos de sus profesionales. El criterio que se siguió para seleccionar a los 8 trabajadores fue suprimir en Inmuba el personal dedicado de forma directa al desarrollo de proyectos de obra nueva y mantener el de rehabilitación y gestión.

En julio pasado, el Consejo de Administración de Inmuba acordó por unanimidad iniciar el procedimiento de sucesión empresarial regulado en el artículo 44 del Estatuto de los Trabajadores, tras la instrucción del expediente por parte del ayuntamiento que había concluido con todos los informes favorables, después de que sindicatos y trabajadores fuesen informados del procedimiento. En la primera reunión del periodo de consultas para llegar a un acuerdo entre los trabajadores y la representación del ayuntamiento, el concejal de Urbanismo, Celestino Rodolfo, defendió que el criterio de selección de los 8 trabajadores ha sido su pertenencia a un departamento, a una unidad productiva que se transmite en bloque, sin tener en cuenta su antigüedad; de hecho, 4 son de los que más tiempo llevan en la empresa. En esta primera reunión, la representación de los trabajadores planteó que en lugar de transmitir a los trabajadores se optase por vender servicios al ayuntamiento que preste Inmuba, pero el equipo de gobierno ya lo sopesó y lo descartó.

Desde el inicio de la negociación, los trabajadores han aceptado la propuesta del ayuntamiento del servicio al que serán destinados y el organigrama, siempre que se les reconociesen los niveles y jefaturas, aunque la transmisión supusiese una reducción en sus salarios en aplicación del convenio marco. Pero no se alcanzó un acuerdo con la concejala de Personal, Beatriz Villalba, para equiparar las jefaturas reconocidas a los trabajadores con alguna en el ayuntamiento, a las que estaban dispuestos a renunciar si se les mantenía la antigüedad, el nivel profesional y complementos, petición que enquistó la negociación porque la concejala defendía que a igual puesto corresponde el mismo salario.

Tras concluir la quinta reunión del periodo de consultas sin acuerdo, el alcalde manifestó su interés en participar y lo ha hecho en las tres últimas. Los trabajadores le presentaron su propuesta y Fragoso contestó con una alternativa de integración que supone respetar los niveles y equipara el salario del convenio marco del ayuntamiento con una diferencia económica de un 5%, que se reducirá con la incorporación a la carrera profesional, que permitirá su equiparación en un par de años. El acuerdo tiene que someterse ahora al Consejo de Administración y al pleno de la corporación (junta general).