Histórica noche la que ayer vivió Cáceres. Histórica porque hacía 25 años que la capital no celebraba un entierro de la sardina (los más veteranos recordaban aquellos desfiles con carrozas incluidas que recorrían entonces Cánovas y en los que participaban todas las asociaciones de vecinos en los tiempos en los que la fiesta pagana por excelencia brillaba con luz propia). Histórica porque se desarrolló a modo de protesta tras el inesperado cierre de la carpa de Carnaval de la plaza Mayor el pasado sábado provocado por una falta de entendimiento entre el Ayuntamiento y la Junta, que impidió una ampliación de horario de locales de copas en una noche tan señalada en el calendario. Histórica porque los carnavaleros se unieron por una sola causa: acusar a los políticos de haber dejado --dijeron textualmente-- "tirada a la ciudad".

El entierro de la sardina lo convocó el grupo de Facebook 'Soy de Las Trescientas' , administrado por José Luis González. Citados a las 20.30 en la tradicional plaza del Madroño, acudieron unas 300 personas, entre vecinos del barrio y representantes de la Asociación del Carnaval, que este año tras la polémica originada ha tomado un inusitado impulso.

Su presidenta, Marisa Iglesias, aseguró en declaraciones a este periódico que "una vez que tenemos claro que la culpa de todo esto la ha tenido solo y exclusivamente el ayuntamiento, el año que viene seguiremos y lo haremos con más fuerza porque todo Cáceres se ha solidarizado con nosotros. Por eso, pediremos directamente a la Junta de Extremadura una ampliación horaria para que no se monte la que se ha montado este año".

El desfile se desarrolló sin incidentes, aunque llamó la atención la presencia de un coche del Cuerpo Nacional de Policía que patrulló por Las 300 durante el recorrido. "El 27 de diciembre juntamos aquí a 500 y pico personas para las uvas y no había un solo policía", dijo José Luis González, quien tildó de "patética" la actuación de los políticos en el asunto de la carpa. "Si es que en Womad y en la feria están hasta las tantas y no van los antidisturbios". Y añadió: "Estamos hartos de tanto politiqueo y de que al final quien está en medio son los ciudadanos, los más perjudicados".

Al grito de "No nos mires, únete" o "¿Alcaldesa dónde te metes que no se te ve?", los vecinos afearon a Elena Nevado que no les haya dado explicaciones y que no haya participado este año en ningún acto del Carnaval. Seguidamente, indultaron a la sardina, que excepcional e históricamente también, no pereció entre las llamas. "No nos han dejado terminar el Carnaval, así que tampoco merece morir en el fuego", zanjaron los carnavaleros.