Los comerciantes del mercado de Ronda del Carmen ven por fin la luz. Tras un año de obras, tiempo en el que tuvieron que trasladarse a la planta superior, ayer abrieron sus puertas en la renovada planta baja que, como la de arriba, tiene una superficie de 560 metros cuadrados entre los que se reparten 13 puestos, además de otros cuatro que saldrán a concurso próximamente.

La carga y descarga funcionó con normalidad en el primer día de apertura y los comerciantes se mostraron contentos con el resultado. "Hemos pasado mucho, como en cualquier obra, pero ha merecido la pena", apuntó ayer Gema, de la frutería Juani. Jesús, de la pollería Román, señaló que el mercado "ha quedado bastante bien", aunque resten por acabar "los poyetes de cada puesto" y espera que a partir de ahora "remonte el negocio" tras pasar "las últimas cinco semanas cerrados".

La obra arrancó en marzo del año pasado con un plazo de ejecución de seis meses que se ha visto incrementado en más del doble, ya que hasta "principios de este verano" no se prevé que tanto la planta de arriba como la plaza exterior, las dos partes que restan, estén finalizadas, apuntó ayer el concejal de Urbanismo, Víctor Bazo. "En la planta de arriba las instalaciones están preparadas, solo restaría acondicionar los nuevos establecimientos", añadió.

Cabe mencionar que actualmente se están elaborando los pliegos para los 10 locales que saldrán a licitación, casi todos ellos de hostelería, excepto tres cervecerías y una ludoteca.