La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Cáceres juzgó ayer a dos acusados de protagonizar una pelea en Talayuela, en la que uno de ellos perdió la vista en un ojo tras ser golpeado con la hebilla de una correa. El juicio tuvo que ser suspendido por la incomparecencia de un testigo de los hechos y se reanudará dentro de dos semanas. La Fiscalía pide inicialmente nueve años de cárcel y más de 100.000 euros de indemnización para N. R., uno de los acusados al considerarle responsable de un delito de lesiones. Para M. M., el otro implicado en la pelea, solicita 40 días de multa a razón de diez euros por una falta de lesiones.

En la vista oral celebrada ayer, en la que tuvieron que ser asistidos por un intérprete magrebí, ninguno de los admitió su culpabilidad en los hechos ocurridos el 11 de julio del 2009 en las inmediaciones de la piscina municipal donde ocurrió la trifulca.

SIN MOTIVO Según el relato del fiscal en su escrito de conclusiones provisionales, la discusión se originó "sin motivo aparente". M. M. propinó varios golpes a N. R. en el cuello y en el costado derecho, a los que éste respondió dándole con un cinturón que llevaba puesto, golpeándole en la cara. La agresión le provocó el estallido del globo ocular derecho, además de una fractura nasal y otras lesiones en el rostro de las que tardó en curar 135 días y por las que fue hospitalizado 30. Por su parte, N. R. sufrió una herida inciso-cortante en la cara lateral izquierda del cuello y otra herida contusa en la cara anterior de hemitórax derecho, según precisa el Ministerio Público en su escrito.

Los dos acusados en esta causa admitieron ayer que sí se conocían. Ninguno tiene antecedentes penales y ambos disponen de residencia legal en España. En la vista oral también testificaron los guardias civiles que intervinieron en el suceso y realizaron el atestado, aunque el testigo clave --también de nacionalidad marroquí-- no compareció para que ofreciese al tribunal su versión de los hechos.