El PSOE presentó el jueves la precampaña de su candidatura a las elecciones municipales del 26 de mayo. Su eslogan es ‘Ahora Luis. Siempre Cáceres’, aunque como consigna alternativa también valdría ‘Ahora Luis o nunca’. El PSOE no es un partido que dé muchas oportunidades, salvo que te llames Pedro Sánchez y que te las dé la vida, y por eso Luis Salaya se juega mucho más que otros candidatos en la cita del 26-M. Él, al igual que Elena Nevado, dará un salto el último fin de semana de mayo que le puede llevar a la cima o al fondo del barranco. Para ellos dos no habrá salientes donde agarrarse.

Hace cuatro años Salaya fue el candidato sorpresa tras ganar las primarias socialistas. Las volvió a ganar el pasado junio y repite como cabeza de lista, aunque con la diferencia de que en las primarias socialistas de hace menos de un año contó con el respaldo del aparato del partido frente a la otra candidata, Susana Padilla, que se presentó tras renunciar Fernando Solís, quien en 2014 se quedó a un puñado de votos de ganar a Salaya y que amagó con un segundo asalto que no se produjo tras desestimarse que la votación fuese abierta a los simpatizantes.

El partido da a Salaya una segunda oportunidad. No habrá más y él lo sabe. Su precampaña para las elecciones del 26M la inició en junio de 2015, el día después de que Ciudadanos pactó con el PP la Alcaldía. Son ya casi 4 años para darse a conocer. Lo recordó el jueves, cuando mencionó las numerosas reuniones con colectivos y las visitas a cada rincón de la ciudad.

Ahora ganar unas elecciones no significa que se gobierne, la Alcaldía se consigue en los pactos postelectorales, esto puede ayudar a Salaya si pese a la fragmentación del voto de la derecha no logra ganar y si se cumple lo dicho por el líder de Ciudadanos en la región, Cayetano Polo, quien ha repetido por activa y por pasiva que su partido no volverá a dar la Alcaldía a Elena Nevado si necesita sus votos. Otra cosa será si PSOE y Cs tienen que sumar junto con los concejales de Podemos, un triángulo difícil, por no decir imposible, de cuadrar.

No solo Salaya se juega su futuro político. También lo hace la secretaria general de los socialistas cacereños, Belén Fernández. Ambos van de la mano desde hace 4 años, una bicefalia con Salaya en el ayuntamiento y Fernández en el partido. La secretaria general puede ser el relevo de Salaya en una próxima elección municipal, pero en el PSOE, un partido que no es familiar sino de familias políticas, ya habrá quien pase factura no solo a Salaya, sino también a Fernández, si hay un descalabro en las urnas.

El PSOE de Cáceres afronta la cita de mayo con el compromiso de hacer un programa lo más abierto posible a la participación ciudadana, contar con el mayor número de aportaciones de colectivos y grupos ciudadanos. Se presenta como la alternativa a los 8 años de gobierno de Elena Nevado y con un candidato, Luis Salaya, que sabe que es ahora o nunca.