Uno de los vecinos afectados por la crecida del río Salor ha denunciado en el juzgado de guardia de Cáceres el corte del camino alternativo que permite a los propietarios de fincas de la zona conocida como Cuartos del Baño el acceso y salida de sus viviendas en caso de desbordamiento. Las fuertes lluvias procaron que durante todo el fin de semana los vecinos de esta zona, entre Malpartida de Cáceres y Aliseda, pero en el término municipal de la capital cacereña, no pudieran llegar ni salir de sus casas debido a que el río Salor cubría el badén de acceso habitual y el alternativo, que cruza la finca denominada La Jabalina, está cortado por su propietario.

En concreto, ha sido Antonio Gil, uno de los vecinos, quien ha presentado la denuncia, aunque no descarta que se puedan unir más afectados. Gil considera en su requerimiento que el camino cortado es público, según «se desprende del documento Catálogo de Caminos Públicos» del Ayuntamiento de Aliseda.

Antonio Gil asegura en su denuncia que esta pista, conocida como ‘Caminos de las Almeidas’, la viene utilizando «en caso de emergencia por crecidas del río Salor desde la adquisición de mi propiedad en el año 1988, por ser el único acceso en caso de desbordamiento», como ocurrió este fin de semana. Sin embargo, Gil expone que, «al necesitar pasar, me encuentro que el propietario de la finca La Jabalina ha construido una puerta de desproporcionadas dimensiones, que se encuentra cerrada y dotada de un sistema de trampas de pinchos, impidiendo el libre tránsito de acceso y salida de mi domicilio y propiedad», así como al «resto de propietarios y moradores de la zona».

Este diario ha podido ponerse en contacto con el propietario de la finca La Jabalina, que prefiere no dar su nombre, y que se remite al ayuntamiento cacereño, «el Catálogo de Cáceres y el registro de la propiedad dicen que el camino es privado» y asegura que prefiere «no entrar en opiniones de parte».

El Catálogo de Caminos Públicos del Ayuntamiento de Cáceres, aprobado en pleno el 22 de diciembre y publicado recientemente en el Boletín Oficial de la Provincia, considera el camino de la disputa como privado. Ante la denuncia de varios vecinos, el ayuntamiento encargó un informe a la Sección de Inventario del consistorio, que se basó para emitir su decisión en en el registro de la propiedad, tanto de Cuartos del Baño como de la finca en la que se incluía antes de su partición en parcelas, conocida como Dehesa Monte Almeida, y el Libro de Yerbas, de 1909, donde se registraron las dehesas, caminos y servidumbres de paso de la época. Según el texto aprobado por la jefa de sección de Inventarios, el camino al que se refieren los vecinos «no aparece como camino público en ninguno de estos documentos».

Otro informe anterior, en este caso del Servicio de Urbaminismo, Sección del Sistema de Información Geográfica del Ayuntamiento de Cáceres, basado en los mismos documentos originales, afirman que el camino no es público y, según el Libro de Yerbas, «no tiene servidumbres de paso».

Antonio Gil alega que en el catálogo elaborado por la Junta de Extremadura sí aparece como público, así como en el catastro, y que éste viene generado por su uso común. Según Gil, «no es un ayuntamiento quien tiene que decidir si un camino es público o no, sino un juzgado», por lo que está dispuesto a recurrir a los tribunales hasta sus últimas consecuencias. De momento, ya ha presentado una denuncia en el juzgado de guardia de Cáceres y hoy registrará un procedimiento de investigación en el ayuntamiento.

Otra de las cuestiones a discutir es si las alrededor de setenta viviendas de la zona son legales o no. Según Carlos Rico, administrador de estas propiedades, las viviendas están declaradas «fuera de ordenamiento, una figura legal», y considera que si no lo fueran, el ayuntamiento cacereño hubiera actuado para demolerlas.