El diputado nacional del Partido Popular Amador Alvarez, confió ayer en que la cumbre de partidos que PSOE, PP e Izquierda Unida tienen previsto celebrar en septiembre contribuya a frenar la crispación política que se vive desde hace meses en varias localidades de la provincia cacereña, una de ellas, precisamente, Carrascalejo, el pueblo donde Alvarez lleva siendo alcalde desde hace ya 25 años.

Esa tensión entre partidos llevó ayer al conocido político extremeño a comparecer en una rueda de prensa en la que denunció ser víctima de una "maniobra de difamación" por parte del concejal socialista de Carrascalejo Ramón Martín. El pasado lunes Martín recriminó públicamente a Alvarez, al que acusó de negarse a facilitarle las cuentas.

El alcalde del municipio dijo que si los socialistas quieren realmente frenar la crispación "debe expulsar" de sus filas a Martín, al que definió como una "joya de la provocación".

LA DENUNCIA Alvarez comentó que Martín tiene una denuncia del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil por levantar una casa en suelo no urbanizable, "sin dar de alta a los trabajadores".

El ayuntamiento le abrió un expediente de protección de la legalidad urbanística y le cortó la luz "porque se había enganchado sin permiso a un transformador municipal de forma fraudulenta e implicando riesgos".

Dijo que Martín le denunció y que después de pasar por los juzgados diversas denuncias y recursos, la Audiencia ha dictado una sentencia favorable para Amador Alvarez y cuyo fallo dice que "el único responsable" de la actuación "es el denunciante".