Gran noche la que pasó en Puebla (México) nuestro más laureado director de orquesta Antonio Luis Suárez junto a Alejandro Sanz y todos sus músicos, en una actuación fantástica que disfrutó al máximo y en la que le trasladó su pasión por Cáceres. Lo mismo le ocurrió al empresario hotelero de la cadena Destino Deluxe, el cacereño Fran Piñero junto a los extremeños Estopa en el concierto ‘Por ellas’ de Cadena Cien. Con el dúo tuvo tiempo de departir Piñero de ese entusiasmo que los hermanos Muñoz sienten por la región, ahora que se cumple el 20 aniversario de su mítico ‘Por la raja de tu falda’ y está calentito ‘Fuego’, el primer disco con canciones nuevas en cuatro años, la pausa más larga registrada hasta ahora por Estopa, que en este nuevo trabajo no dejan de lado su autenticidad. Ojalá llegue pronto la gira y ojalá que incluya a la ciudad, que por aquí estamos ávidos de grandes conciertos.

Mientras son cada vez más los famosos que se sienten fascinados por Cáceres, la capital sigue su curso y la crónica social nos lleva hasta La Quinta de Illescas, el lugar donde contrajo matrimonio Belén Martín Sánchez, hija del subdelegado de Defensa, Enrique Martín Bernardi, que actuó de padrino. La joven se ha casado con David Platero Azpilicueta; su madre, Olga, fue la madrina. Bernardi lució traje de gala del Ejército y la pareja se marcha de luna de miel a la isla de Bali.

Entretanto, nuestro alcalde Luis Salaya parece que no pierde el norte y sigue manteniendo sus costumbres; vamos, hablando en plata, que no se le ha subido el cargo a la cabeza y, mochila en mano, acudió al mercado de frutas y hortalizas organizado por la plataforma ‘Moret se mueve’, en la que se da participación a estands con productores de la Ribera del Marco, algunos agrupados en cooperativa, y comerciantes de alimentos ecológicos. El objetivo es el de dinamizar una calle cada vez más vacía de tiendas y fomentar la economía local y el comercio de proximidad.

Hacía tres años que Moret no acogía este mercado. Hasta entonces lo celebraba cada domingo del mes de agosto y un domingo de cada mes en invierno. Ahora la cita se repite con asiduidad y Salaya no duda en dar ejemplo.

También da ejemplo Rafael Mateos, portavoz del PP en el ayuntamiento, participando en la Marcha Rosa y sumándose a la batalla contra el cáncer. Mateos está cambiando de estrategia y eso parece que le funciona. Huye de las apariciones con la exalcaldesa y quiere demostrar que se vale por sí solo, que es algo más que un pupilo con aspiraciones a alcalde. Mateos no es un hombre de estridencias, y ahora su presencia en los medios, medida y sin sobresaltos, está gustando a buena parte de la opinión pública. Ganan terreno Salaya y Mateos mientras el resto de líderes políticos de nuestro consistorio parecen estar a otra cosa. Podemos, diluido, Ciudadanos, desdibujado, y Vox, aniquilado.

Nuevo negocio

La vida en el plenario transcurre a las puertas de unas nuevas elecciones que, seguramente, harán cambiar muchas estrategias. De momento, da gusto salir por Cáceres, donde florecen los negocios como el que se inauguró el jueves: Caballerizas, en la calle Pizarro, que han montado Conrado Gómez, Eduardo Álvarez, Manuel García-Monge y Sergio Martínez. El local forma parte del edificio propiedad de Joaquín Pitarch, que incluye el Hotel Albarragena, que gestiona Juan Pulido, y el restaurante y tapería de Juan Santisteban.

Los empresarios de Caballerizas han recuperado un enclave que se caía a cachos a través de una obra que cumple con todos los requisitos marcados por el Consorcio Cáceres Ciudad Histórica, respetando las antiguas caballerizas y los viejos comederos. Ha aumentado el aforo con la instalación de salidas de emergencia y un elevador para discapacitados. Todo ello con el fin de crear un espacio para todo tipo de eventos temáticos, prebodas, comuniones o cumpleaños. Han rescatado las terrazas y darán trabajo a entre 10 y 12 personas.

La casa de Pizarro fue la vivienda del conde de Santa Olalla, ministro de Hacienda con Isabel II. Era en su origen, digámoslo así, la Bolsa de Cáceres, el centro de contratación, el establecimiento de crédito de mayor nombre e importancia de Extremadura. En sus oficinas había empleados franceses, ingleses, alemanes e italianos, de todas partes, porque en todas partes tenía negocios y corresponsales. Detrás de su domicilio, para alquilar y para residencia de sus numerosos servidores, edificó las 23 viviendas que dieron nombre a la Barriada de ‘Casas Nuevas de Carrasco’, situada en la calle del Camino Llano, que servirían de alojamiento a los numerosos empleados de su casa de banca y de los restantes negocios en los que participaba. Los considerables beneficios que obtuvo con el comercio lanero y los negocios bancarios convirtieron a su propietario en una persona rica en inmuebles urbanos y bienes raíces.

Por motivos que se desconocen, en 1829 se reconoce una deuda de 2.000.000 de reales a favor de la Casa de Felipe Victorio Ravara e Hijo, entidad con sede social en Madrid. Para su pago se hipotecan la cabaña lanar y diferentes fincas, rústicas y urbanas, entre las que se incluyen 17 casas, 7 partidas de yerbas, 3 montes, 67 fanegas de tierra de labor, un tinado, un molino de aceite, una viña y tres huertas, por valor de 2.044.130 rs. y 12 mrs; levantando finalmente la hipoteca en 1832. La vivienda se reformó en 1877 dejándola en el estado actual. Historia de Cáceres reconvertida ahora en un buen y necesario negocio. Suerte.