-Hoy es habitual acudir a un quiosco y ver revistas ilustradas con imágenes de hombres musculados. Pero fue el canadiense Joe Weider quien construyó un imperio basado en el culturismo fundando publicaciones como ‘Muscle and Fitness’. Ahora usted es finalista de la primera edición del concurso de la revista ‘Men’s Health’ Top Trainer España y junto a otros tres participantes puede convertirse en el primer Top Trainer de Men’s Health España. Hable de ese concurso...

-‘Men’s Health’ es la revista de fitness más conocida en España y en el mundo. El año pasado buscaban concursantes que fueran portada de algún mes y quedé entre los 15 finalistas. Este año organizan un concurso para elegir al mejor entrenador de España, alguien que proclame el estilo de vida saludable, ofrezca rutinas de entrenamiento y diga cómo comer. Me considero un profesional en mi ámbito, me encanta lo que hago, que la gente a la que entreno entienda el por qué de cada movimiento que realiza. He sido elegido entre cuatro finalistas y este mes se conocerá el resultado. Los lectores pueden votar en el link http://toptrainer.menshealth.es. De los votos y la deliberación de un jurado saldrá el ganador.

-Viéndole me viene a la mente Demarjay Smith, de padre jamaicano y madre puertorriqueña, a quien con tan solo 9 años se le conoce como el ‘Joven entrenador jamaicano’. Después de ver uno de sus vídeos, se hacen irresistibles las ganas de colgarse de cualquier barra y empezar a hacer flexiones. El pequeño ha conseguido encandilar a su vecindario del Bronx neoyorquino con este mensaje: «Todo es posible mientras en el cuerpo quede algo de voluntad». ¿Por qué se hizo usted entrenador?

-Siempre me ha gustado llevar un estilo de vida saludable. Practicar y enseñar deporte es mi hobby. Un entrenador top debe tener formación pero también empatía, de manera que un entrenador personal es también un educador. Yo no tengo clientes, tengo estudiantes, y los llamo así porque los formo para que cuando llegue el momento de decirles adiós ellos sepan qué hacer para cuidarse solos.

-Usted ha estudiado en Estados Unidos, Escocia, México... Es licenciado en Ciencias del Deporte por la Universidad de Extremadura, dispone de un Master Universitario de Investigación, ahora trabaja en Barcelona y le avalan más de seis años de experiencia profesional en el mundo del fitness ¿Es necesario cultivar la mente para cultivar el cuerpo?

-Ambas cosas van de la mano. Tenemos que estar preparados, tener una buena mente para saber qué queremos hacer y un cuerpo acorde a lo que buscamos. Tenemos que formarnos como personas y, junto a ello, entrenar nuestro cuerpo, que es nuestra herramienta para vivir.

-Y ahora tiene además su propio negocio, de modo que usted es un emprendedor...

-Llevo casi tres años en Barcelona. Estuve trabajando en varios gimnasios y con la experiencia que tenía aposté y me arriesgué. Hace tres meses fundé mi propia marca, 24hourbalance, una empresa de entrenamiento que fomenta el equilibrio. No tienes que pasar tres o cuatro horas al día haciendo deporte. Tampoco tienes que hacer dieta porque una dieta es algo que se empieza y se termina. Queremos crear un estilo de vida saludable que perdure en el tiempo. Promovemos una buena nutrición, un entrenamiento correcto y un descanso. Tenemos una página web y estamos centrados en los entrenamientos personales en casas, en centros de entrenamiento, en la calle si el tiempo lo permite. Somos un equipo multidisciplinar de tres personas conmigo como entrenador, además de nutricionista, osteópata y fisioterapeuta.

-Surge su empresa en un momento en el que cuidarse está de moda. Hasta los políticos americanos lo hacen...

-Sí. La gente invierte en ello al darse cuenta de sus beneficios.

-Es un mensaje alentador, pero ocurre que en las nuevas generaciones hay un exceso de querer ser Ronaldo o Elsa Pataky...

-Todo el mundo tiene una imagen del cuerpo que le gustaría tener, aunque eso solo debe ser una motivación para hacer deporte.

-Claro, porque la batalla por el cuerpo perfecto puede convertirse en una pesadilla de aislamiento y anabolizantes. Ese trastorno tiene un nombre: vigorexia. ¿En qué momento la sana preocupación por la imagen se transforma en una enfermedad?

-Lo que promuevo es el equilibrio. Tenemos que ir al gimnasio y comer bien, pero por supuesto tenemos que cuidar a nuestra familia, a nuestros amigos: sociabilizarnos. En el momento que empezamos a dejar de lado esos aspectos importantes de nuestra vida y nos centramos solo en el ejercicio o en comer de forma saludable es cuando estamos sobrepasando el límite y puede convertirse en un problema.

-La obsesión por la imagen corporal se ha convertido en uno de los distintivos de las sociedades desarrolladas, en las que un físico esbelto y musculoso se asocia con el éxito y el atractivo sexual. ¿Acaban estas personas convirtiéndose en víctimas?

-En Publicidad buscan una imagen que venda, pero cada uno en nuestro interior tenemos nuestra propia belleza y esa es la que tienes que mostrar al mundo. Quizás no seas la persona más alta, pero hablas de una manera muy especial, cuidas a la gente... Cada uno tiene que buscar su belleza, que no siempre tiene que ser la física. Cada uno puede llegar a su mejor versión.

-¿Es posible tener abdominales sin ir al gimnasio? Hay gente que lo consigue haciendo running, yoga o jugando al fútbol...

-Tienes que tener una constitución genética que te sea muy favorable para tener abdominales sin actividad física. No hay que ir necesariamente al gimnasio para ello, hay muchas otras actividades. Incluso en casa puedes mantenerte en forma, puedes sacar esos abdominales si lo unes con la alimentación adecuada. Tienes que generar un gasto calórico, darle al músculo una serie de estímulos intensos, variados, para que vaya cogiendo forma, para que vaya perdiendo grasa. Y luego tienes que tener mucho cuidado con lo que comes para que no se convierta en grasa. Para que realmente veas el músculo.

-Ahora que habla de eso me viene a la cabeza el boxeo. La gente que piensa que esta disciplina solo sirve para cultivar el cuerpo, está en un error. Alivia tensiones, eleva la autoestima... Y sí, también mejora la celulitis...

-Sí, porque el boxeo son intervalos de alta intensidad y hay estudios que apuntan que este tipo de entrenamientos aumentan el metabolismo basal y el cuerpo se vuelve más eficiente para la quema de grasas, incluso cuando está en reposo o dormido.

-Una de las quejas de quienes acuden regularmente al gimnasio es combatir la monotonía de los ejercicios. ¿Cómo se logra, es necesario mayor variedad en los aparatos, por ejemplo?

-Promuevo la variedad, es una de mis premisas. Con ello fomentamos la motivación de las personas para seguir practicando deporte. Y esa variedad le va a venir bien al músculo porque no se va a asentar. ¿Cómo lo hacemos? Hay muchas formas. Todos nos hemos fijado alguna vez en ese compañero del gimnasio, en las redes sociales donde mucha gente muestra sus ejercicios... y podemos sacar ideas. Como realmente vas a ver grandes cambios y grandes mejoras va a ser con la variación de tus ejercicios.

-Hay quien dice que si te pasas con el deporte tendrás caries, oxidación celular, arrugas o daños en las articulaciones...

-Puede ocurrir. Por eso siempre insisto en que en el equilibrio está la clave.

-¿Por qué hay un momento en que dejamos de perder peso con el ejercicio?

-Cada persona es un mundo, tiene un somatotipo, una genética. Tendríamos que ver si el peso viene de la musculatura, de la grasa, de los huesos, del nivel de hidratación... Pero no hay que llegar a obsesionarse, tienes que encontrarte bien físicamente, ser capaz de hacer tus ejercicios diarios y verte bien en el espejo; si estás contento con eso no hay que irse a ningún extremo.

-Los atletas profesionales viven más...

-Estos atletas tienden a vivir más años porque han llevado un estilo de vida saludable.

-Hablemos de la comida. Con toda la que se ha tirado este año en España podrían haber cenado más de dos millones de familias la pasada Nochebuena...

-Es un trabajo que debe hacer la sociedad en su conjunto para que se produzca una transformación en repartir y consumir solo lo necesario. Es una incongruencia que en esta parte del mundo se tire la comida y en la otra haya gente que esté muriendo de hambre.

-Estamos en la era de los veganos, los vegetarianos, celiacos, los intolerantes a la lactosa... ¿Se puede cocinar sin gluten, sin leche, sin carne y sin sal?

-Sí. En los restaurantes ya hay muchas opciones de este tipo, en los supermercados, también. Hay que buscar los nutrientes que vayan mejor a tu cuerpo y siempre consultando con un nutricionista. La dieta ideal, para mí, es la que elimina cualquier tipo de alimento procesado y se centra en alimentos naturales y reales como frutas, verduras, legumbres, granos, frutos secos, pescados tanto blancos como azules, carnes lo más magras posible, aceite de oliva... Hay que quitarse los llamados venenos blancos como el azúcar o la harina. Tenemos un amplio abanico de alimentos naturales y esos son los que hay que elegir.

-¿Cree que un impuesto gradual sobre las bebidas azucaradas beneficia a la salud?

-Ha sido un acierto. Aunque hay cada vez más gente concienciada en llevar una vida saludable, practicar ejercicio y comer bien, el índice de obesidad sigue aumentando y sigue siendo un problema que se debe atajar.

-Sí, porque el 86% de las adolescentes españolas no realiza la actividad física recomendada por la OMS...

-Tendríamos que resolverlo desde la educación, más horas de actividad física en colegios e institutos. Basta solo con mirar nuestro origen: el hombre se movía para ir a cazar. Ahora la gente está delante de un ordenador.

-Expertos de distintos países señalan la necesidad de regular el etiquetado y la publicidad de los alimentos para luchar contra el sobrepeso y otras enfermedades. ¿Qué estamos comiendo?

-A través del etiquetado rápidamente distinguiremos lo bueno de lo malo pero realmente la razón de todo esto es la existencia de grandes empresas que para hacerse más ricas nos tratan como una masa y nos invaden con publicidad de comida basura y de refrescos. Y esa publicidad no se disminuye porque hay intereses económicos de por medio. El que paga es el que sale en la televisión.

-Precisamente, al hilo de esto, un 20% de los niños de 6 años tienen televisión o DVD en su habitación. El porcentaje se incrementa hasta el 37% en los menores con sobrepeso, según un estudio del Ministerio de Sanidad...

-El sedentarismo es una pandemia de las sociedades modernas. Antes los niños jugaban al fútbol en la calle, ahora juegan al fútbol en una videoconsola.

-Entretanto España es la potencia europea del negocio del músculo. La industria de los gimnasios se recupera tras la crisis a lomos del modelo ‘low cost’ y se mantiene entre las más importantes de Europa. ¿Qué opina?

-Si somos sedentarios es bueno que haya gimnasios, algunos de ellos low cost, interesantes porque de forma económica puedes hacer deporte, aunque con ellos también han proliferado los ‘sleepers’, ‘socios dormidos’, que se apuntaban porque eran baratos y luego no iban. Por eso hay que buscar la actividad que te guste, pero debes llevarla a cabo.

-A esta moda del ‘gym’ se suma la del crossfit, que no es algo nuevo, fue creado en el año 2000 en California. En España ya lleva algún tiempo siendo practicado, principalmente por policías, militares o bomberos. Cada día están abriendo más centros a los que acude gente a realizar este entrenamiento. De todas las torturas del fitness moderno, esta disciplina extrema está en alza. ¿Merece la pena tanto sufrimiento?

-Practico crossfit y hay bastantes estudios científicos que corroboran su idoneidad. Nos ofrece variedad, intensidad, resultados y se desarrolla generalmente en equipo. Acudes al box donde se realiza y nunca sabes qué te va a tocar, puedes entrenar con tu propio peso, con movimientos olímpicos o gimnásticos. Son muchos sus puntos positivos y por eso está ahora en auge.

-¿Usted fue un Forrest Gump?

-Era es un poco tirillas (risas). Cuando terminé la carrera comencé a construir el cuerpo que tengo ahora. Con eso y con mi formación puedo ser más creíble.

-¿Qué opina del conflicto de los refugiados?

-Si un ser humano viene a nuestro país con ganas de ayudar y de trabajar, siempre hay que darle una oportunidad.

-Para terminar esta entrevista recordaremos la estrofa de una de las canciones a las que el ya inmortal Freddie Mercury puso voz: «Nosotros somos los campeones. No hay tiempo para los perdedores porque nosotros somos los campeones del mundo...». ¿Es esta canción su talismán?

-‘We are the champions’, de Quenn, refleja esa actitud positiva que hay que tener. Por eso me dedico al fitness, porque me gusta ayudar, proclamar que tras el esfuerzo está la victoria.