"Cáceres merece 'ya' su conservatorio de música". Con este mensaje, impreso en camisetas, alumnos y profesores del conservatorio celebraron ayer su tercera jornada reivindicativa en la calle en demanda de un nuevo edificio para el centro de enseñanza, que cuenta con seiscientos alumnos y que no puede atender todas las demandas de plazas que reciben. El de ayer por la tarde en Cánovas fue un concierto con alumnos de flauta travesera y saxofón. A este seguirán otros dos, los días 3 y 10 de junio. "Estamos a la espera del plan de infraestructuras de la consejería" con las nuevas dotaciones educativas, explicó ayer Leandro Lorrio, director del conservatorio Hermanos Berzosa.
En la explicación sobre el motivo de estos conciertos que dio el conservatorio cuando se iniciaron se detalló que el espacio que ocupan en el complejo cultural San Francisco es insuficiente y que la solución temporal que se ofreció, el uso de aulas del colegio San Francisco que no son adecuadas ya que no disponen de acondicionamiento acústico para dar las clases, se prolonga ya desde hace más de quince años. La opción que se barajó de llevar el conservatorio al palacio de Godoy, junto a la plaza de Santiago, se descartó y se está a la espera de las previsiones del plan de infraestructuras educativas.
Lorrio destacó ayer que desde el año 1992 se establecen en la legislación educativa las condiciones mínimas que deben de reunir los conservatorios, unas exigencias que no cumple el centro de Cáceres. Aunque no esté obligado, ya que el conservatorio cacereño es del año 1987, el director recordó que en otras comunidades se han realizado inversiones para que los centros de enseñanza de música anteriores a la legislación de 1992 se adapten a las exigencias de esta normativa (el real decreto ley que establece los requisitos mínimos de los centros que impartan enseñanzas artísticas).
