Los Amigos de la Ribera del Marco firman un acuerdo para reforestar cinco hectáreas en la Sierra de la Mosca. En concreto, el colectivo que trabaja para proteger el entorno de la ribera ha suscrito un convenio con los propietarios de dos fincas privadas en Cáceres para gestionar los terrenos. En el primer caso, se trata de una parcela en las Barreras del Amparo con 14.814 metros cuadrados y en el segundo es una parcela de alrededor de 40.000 metros cuadrados en La Dehesilla.

Según detalla el documento que han rubricado ambas partes y al que ha tenido acceso este diario, el convenio se hace extensible a diez años con posibilidad de renovación. Durante este tiempo, el colectivo tendrá acceso a los terrenos «llevar a cabo un programa de plantación de arbolado». En este sentido, los amigos de la ribera se comprometen a «aportar y mantener el arbolado» y tendrán a cambio la propiedad de los frutos de la plantación.

Tal y como detalla el escrito, la asociación tiene como propósito promover la conservación y la descontaminación de la ribera, denunciar a las entidades y personas que contaminen y deterioren el entorno fluvial y alrededores y promover una figura de conservación medioambiental e histórica del entorno.

De esta manera, el colectivo pretende continuar con su labor de reforestar el entorno de la ribera después de que el ayuntamiento les denegara el permiso de replantar en la finca pública El Romeral, también ubicada en la ladera de la Montaña, alegando que esos terrenos estaban contemplados dentro de un plan municipal de acción para el Marco. Cabe destacar que la revitalización de la ribera es uno de los principales compromisos del equipo de Gobierno local de Salaya.

De hecho, el propio regidor asumió las competencias en materia de Medioambiente y uno de sus primeros anuncios en cuanto llegó a la alcaldía fue la ampliación de los huertos urbanos como inicio del proyecto para reactivar el entorno de la ribera. A la espera está también otra de las medidas que avanzó que pondría en marcha el gobierno municipal, una propuesta muy reclamada por los ecologistas y que el ayuntamiento ha diseñado de manera conjunta con los colectivos verdes de la capital. Esta ordenanza pretende regular las talas de árboles y dar cobertura y garantías de protección a los entornos naturales de la ciudad.

LA ‘GRAN’ BELLOTADA / Esta iniciativa de los Amigos de la Ribera para reforestar la montaña se une a la que llevó a cabo este pasado fin de semana el grupo de trabajo de Emergencia Climática, conformado por varios colectivos ecologistas de la ciudad para sembrar 10.000 bellotas en Cerro Otero, unos terrenos en los que el ayuntamiento ha dado permiso para replantar 19 hectáreas. Esta propuesta estuvo enmarcada dentro del reto que puso en marcha colectivo Reforest-acción tras los incendios que asolaron Gata en 2015 para sembrar 25 millones de bellotas en toda España.