El personaje protagonista, abogado de profesión, vive en Cáceres y, como tanta gente en estos tiempos de zozobra, es una víctima del covid-19. Pierde su trabajo y se queda sordo, pero a partir de ahí desarrolla extraordinariamente los sentidos del gusto y del olfato. De la mano de Atrio y con el vino como hilo conductor, comienza desde entonces su particular recorrido por el mundo, donde protagoniza todo tipo de peripecias. Y todo ello, con un triángulo amoroso, un viaje interminable y su ciudad natal como punto neurálgico.

El desarrollo de este relato, «con un final sorprendente», según el autor, corresponde a ‘CoVID’, el primer libro del abogado Ángel Luis Fernández Sanz (Madrid, 1964), cacereño de adopción, exprofesor en la Uex y perteneciente al turno de oficio desde 1992 y al de asistencia a mujeres víctimas de la violencia de género desde su creación.

Fernández, persona de inquietudes de muy diverso perfil, ha dado el paso de hacer su primera obra, novelada, de una manera muy original. La idea surgió en el confinamiento, y animado por sus compañeros de promoción (eran 64) y con el Whatsapp como principal medio de comunicación entre ellos. «Un día escribí un relato que dejé incompleto, y mis compañeros me animaron a seguir en él». Y así fue.

El gusanillo le picó tanto que cerró la primera parte con toda la ilusión posible en su obra. «No obstante, continué escribiendo hasta completar una segunda, y tengo en mente continuar la serie con un tercer libro», cuenta el protagonista.

Lo difícil llegó después, según afirma. «Seguramente haya muchos aspectos mejorables, pero el libro es íntegramente mío». Y en ello incluye la corrección, la revisión del estilo y la maquetación, incluidas la portada y la cubierta. También ha creado una página web, y perfiles en las redes sociales «donde iba haciendo partícipes a mis conocidos de todo el proceso». Antes de ello, comenta, y una vez enviado «me sorprendió el enorme número de editoriales que hay, e indagando en la web, me di cuenta de que hay muchas (la gran mayoría) enfocadas a hacer negocio con el escritor».

Lo más difícil, la edición

Lo complicado, en realidad, ha sido la edición real del libro. «A través de foros de escritores te das cuenta del negocio que supone un escritor novel. Te piden cantidades que oscilan entre los 900 y 5000 euros, entregándote a cambio ejemplares de tu propio libro, y recibiendo de las futuras ventas un 10 por ciento», dice el abogado.

«La promoción y difusión que prometen en muchos casos no se corresponde en absoluto a la realidad, y te genera tantas dudas que acabas autoeditando el libro, para lo que existe otro gran número de editoriales que hacen todo el trabajo necesario (cobrando, por supuesto)», añade. Fernández agradece que la editorial Norbanova, de carácter local «y que es la única que me merece todos los respetos», le ofreciera la posibilidad de la edición, «pero decidí hacerlo solo porque ya tenía casi ultimado el proceso cuando me lo ofrecieron», apunta.

El libro se podrá adquirir en la Librería Marisol (R-66) o por la multinacional Amazon.