Frente a las actuaciones para la integración medioambiental de las autovías, los usuarios de las carreteras aún no están concienciados. El personal de conservación retira un promedio de 125 toneladas al año de basura en la provincia. Los operarios las recogen en bolsas específicas amarillas y las envían a centros adecuados para su gestión.

También continúan los daños por vandalismo, que han obligado por ejemplo a desmontar un área de descanso junto al río Almonte, en la margen derecha de la A-66. Existen otras menos afectadas en Baños de Montemayor (A-66) y Trujillo (A-5). Hay quienes se han llevado incluso los columpios y hasta la madera del mobiliario de estos espacios.