La apertura del nuevo edificio del museo de arte contemporáneo de la Fundación Helga de Alvear en Cáceres, que ha contado con una inversión de 10 millones de euros, se ha aplazado "a febrero o marzo de 2021" debido a la pandemia de coronavirus.

La previsión inicial era abrir al público a finales de este año pero se ha decidido retrasar la apertura del nuevo espacio porque la pandemia "impide hacer una inauguración internacional" y afecta también "a la movilidad de los artistas a la hora de participar en el montaje de sus obras".

Así lo ha manifestado a Efe María Jesús Ávila, coordinadora del actual centro de arte contemporáneo, quien también ha señalado que la galerista alemana Helga de Alvear "quiere contar con la presencia de los artistas internacionales en la inauguración y eso ahora mismo no es posible".

Ávila ha asegurado que el montaje del nuevo museo está "muy avanzado", incluso se podría inaugurar ya, pero se trata de un museo con una marcada vertiente internacional. "Queremos que tenga la trascendencia que realmente se merece todo el trabajo realizado y no se quede en el ámbito regional", ha explicado.

Por eso, si la situación lo permite, el arco de fechas que barajan se sitúa "entre febrero y marzo de 2021", porque el montaje interior está "prácticamente finalizado", a falta de incluir aspectos relacionados con la señalética y el grafismo, según ha confirmado Ávila.

"Sabemos que no podrá ser una inauguración multitudinaria, pero al menos que se nos permita hacer pequeñas inauguraciones más internacionales para conectar diferentes colectivos", ha argumentado.

Del proceso de montaje de las piezas artísticas que podrán verse en el nuevo recinto, que cuenta con 8.000 metros, ya se ha avanzado la instalación de una de las obras más atractivas de la colección: "Descending Light", una estructura de metal con luces eléctricas halógenas, del artista chino Ai Weiwei.

"Muchas de las piezas que se exhibirán no han sido nunca expuestas", ha subrayado Ávila, quien ha calificado de "icónica" la lámpara de Ai Weiwei, que "recibirá a todos los visitantes a la entrada del museo".

La inversión en el museo (cinco millones de euros financiados por la Junta de Extremadura y otros cinco por la galerista alemana) ha puesto en pie un ambicioso proyecto del arquitecto Emilio Tuñón, que establece un diálogo con la Casa Grande (actual sede del centro) y crea un recorrido peatonal, que comunica el casco histórico con el área urbana.

De hecho, la extensión de hormigón blanco se halla entre la Casa Grande y la muralla medieval.

Ávila ha recordado que la ampliación es candidata al premio Mies van der Rohe en 2021 y el proyecto de Tuñón ha sido galardonado con el premio Arquitecture Masterprize.