Los vecinos del conocido barrio de Los Castellanos muestran, incluso a través de las redes sociales, su indignación ante lo que consideran «despreocupación del ayuntamiento» en el parque de perros que se encuentra al principio de la urbanización. Quieren alzar la voz para que todos los ciudadanos se hagan eco de su enfado.

Los usuarios más habituales de la zona protestan, entre muchas otras cosas, por la falta de

riego por parte del consistorio. «La última vez que vinieron fue hace dos semanas», lamenta una de las afectadas, que explica como ante la situación que se está produciendo, han tenido que ser los propios vecinos quienes se han movilizado para intentar revertir esa situación.

Para ello, han colocado garrafas de agua al lado de los árboles y son los propios vecinos quienes los riegan. «Cada uno se ha encargado de varios árbole. Tienen las botellas en el coche y cuando les parece se acercan a echarles agua», explica uno de los residentes.

No es esta la única reivindicación, puesto que reclaman más zonas de sombra. «Supuestamente los árboles eran los que tenían que darlas pero, como nos los riegan, pues no pueden crecer», manifiesta uno de los vecinos. Él mismo confiesa que esa es una de las razones por la cual hay muchos usuarios que no pasean por allí. «Hasta las ocho de la tarde no puedes acercarte porque da todo el sol de lleno. Yo me he juntado con otro grupo y nos vamos a la zona del Macondo, pero nos gustaría quedarnos aquí».

Además, exigen mayor mantenimiento y limpieza ya que con el paso del tiempo se ha convertido en una zona donde no es recomendable llevar a las mascotas. «Si entras te puedes encontrar hasta baldosas rotas», sostiene una usuaria habitual. «Hace poco hubo otra oleada de envenenamientos en el parque así que ya hasta nos da miedo traer a los perros», añade.

El pasto amarillo también es motivo de queja ya que en estos meses calurosos puede ser la causa de algún tipo de incendio no deseado. «Tampoco puedo pedir un césped verde como el del Rodeo, pero un poquito mejor sí podía estar», comenta una de las vecinas de Los Castellanos.

También demandan más papeleras. «Como no hay, mucha gente ni siquiera recoge las heces de sus mascotas y les hemos tenido que dar el alto», agrega otra de las personas consultadas. A esto le añaden la falta de bancos, que, a su juicio, convertiría el lugar en uno mucho más acogedor. Lo exigen principalmente para las personas mayores que transitan por allí con sus mascotas.

Confirman que ya le han comunicado al nuevo ayuntamiento la situación, enumerando sus peticiones y confían en que el equipo de Luis Salaya atienda a sus demandas.