La Asociación de Escritores de Graffiti Urban Art trabajará en nuevos proyectos después del verano. Su presidente, Tocha, afirma que ha trabajado para conseguir más lugares habilitados para pintar. Declara que están "un poco parados porque tiene pocas ayudas".

La asociación recuerda que sus estatutos mantienen un régimen interno que prohíbe las pintadas en zonas desautorizadas y que los jóvenes que participan tienen interés en el movimiento artístico, lejos de la actitud vandálica.

Con el anterior gobierno, la corporación presentó un proyecto en el que proponían alrededor de una docena de muros de la ciudad, de los cuáles solo les fueron cedidos dos. Asegura el presidente que pronto se pondrá en contacto con la nueva jefatura municipal para continuar este proyecto y solicitar más lugares habilitados para "fomentar el arte del graffiti en los chavales".

Esta asociación se creó hace tres años. El presidente, Tocha, apunta que es un colectivo sin ánimo de lucro que trata de fomentar el arte del graffiti entre los jóvenes. Sin olvidar que lo practican siempre en lugares habilitados, como recoge su régimen interno.

El colectivo está formado por cinco directivos y cuenta con 10 socios de entre 12 y 18 años con ganas de aprender de sus maestros, grandes conocedores del graffiti .

El último proyecto que desarrollaron se realizó hace ya dos años en Aldea Moret gracias al Instituto de Asuntos Sociales, donde presentaron una exhibición y crearon un taller para enseñar a pintar.

Pero debido a las dificultades económicas que atraviesan, no han podido presentar más proyectos porque las subvenciones las reciben después de haberlo fianciado ellos previamente, y el colectivo carece de fondos para adelantarse a la inversión que necesitan para las actividades.