La familia Moreno vive con inquietud las obras que se realizan en el ensanche de Mira al Río. Residen desde siempre en San Marquino y aseguran haber tenido que esperar hasta 25 minutos en dos ocasiones a que una ambulancia del 112 llegara a su domicilio en la calle Urano. La madre, Manuela Muriel, de 51 años, sufrió sendos infartos el 28 de febrero y el 11 de junio y, según asegura su hijo Rubén Moreno, de 28 años, el ayuntamiento se comprometió a que los servicios de emergencias pudieran acceder por la calle Mira al Río cuando se presentó el proyecto.

Rubén afirma que en los dos casos la ambulancia "tuvo que dar la vuelta a Cáceres" porque utilizó el itinerario de Hernán Cortés y Puente Vadillo, y pone como ejemplo que él tardó menos desde su trabajo en Charca Musia. Critica que no haya habido "previsión" y que les prometieran que el corte de Mira al Río nunca iba a ser total, excepto en momentos puntuales. La propuesta de los afectados es que se asfalte el camino de Fuente Fría para que puedan acceder las ambulancias.

Por su parte, el concejal de Tráfico, Santos Parra, lamentó ayer estos hechos y afirmó que el hallazgo de restos arqueológicos en Mira al Río ha impedido mantener esta vía abierta para emergencias como estaba previsto. A pesar de ello, el edil dijo que las ambulancias pueden utilizar el camino de Fuente Fría para acceder a San Marquino y anunció que intentará retirar las vallas en Mira al Río para que pueda entrar las emergencias.

El concejal Javier Castellano, que tuvo conocimiento ayer de la denuncia a través de este diario, añadió que la policía local abrirá una investigación para determinar los hechos expuestos por los afectados.