Tras un año y medio en prisión provisional, el joven boliviano acusado de golpear con un vaso de cristal a otro joven y causarle el estallido del globo ocular ha quedado hoy en libertad provisional.

El juicio contra Carlos Eduardo Llano Pinto, acusado de un delito de lesiones por el que el fiscal pedía para él 8 años de prisión, se celebró ayer en la Audiencia Provincial de Cáceres y hoy, apenas quince horas después de su conclusión, la misma Sala que le juzgó dictó un auto acordando "la libertad provisional del procesado Carlos Eduardo Llanos Pinto" y su comunicación al director del Centro Penitenciario de Cáceres "a través del oportuno mandamiento a fin de que sea puesto en inmediata libertad si no estuviera privado de ella por otra causa o motivo legal".

Y como no lo estaba, sobre la una de la tarde ha abandonado el centro penitenciario. Fuera la esperaban, "muy felices", sus padres, que habían acudido a Cáceres desde San Sebastián, donde residen, para acompañar a su hijo en el juicio.

Antes de abandonar la ciudad se reunieron con su abogado, el letrado cacereño Ángel Luis Aparicio, que ha valorado "muy positiva" esta orden de puesta en libertad provisional para Carlos Eduardo, pues en su opinión "hace prever que la sentencia será absolutoria".