La Audiencia Provincial de Cáceres ha emitido el primer auto a nivel nacional que paraliza, como medida cautelar, un desahucio hipotecario. La decisión de la Sala se basa en la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que considera que la legislación española de ejecuciones hipotecarias vulnera la normativa comunitaria de protección de consumidores y usuarios al no permitir la alegación y defensa de la existencia de cláusulas abusivas.

El lanzamiento ya había sido notificado y estaba previsto para el mes de junio, sin embargo, de momento, no se llevará a cabo. Ahora deberá ser un juez el que determine si el desahucio es justificado o, en su caso, considera la anulación de las cláusulas de la hipoteca (en este caso solo habría que devolver el dinero prestado por la entidad bancaria).

Para ello, según indica el abogado de la defensa, Juan Manuel Rozas, deberá presentarse un "incidente extraordinario de oposición" a la ejecución hipotecaria, que en este caso está basado en las cláusulas abusivas por el elevado tipo de interés y la falta de información ofrecida sobre el procedimiento hipotecario. Una vez que el magistrado emita sentencia, podría ser recurrida incluso hasta el Tribunal Supremo. Mientras tanto, la afectada, natural de Plasencia y que prefiere mantenerse en el anonimato, podrá continuar en su casa hasta que se resuelva el proceso.

El camino no ha sido fácil, ya que en un primer momento el juzgado de primera instancia número 3 de Plasencia denegó en dos ocasiones la paralización del lanzamiento. Tras esto, el abogado interpuso un recurso de apelación por "la vulneración del principio constitucional de igualdad, del derecho a la tutela judicial efectiva y del derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada". Ahora la Audiencia le da la razón.