La alcaldesa, Elena Nevado, adelantó ayer que en 2017 se produjo un incremento en el número de usuarios del autobús urbano. Calculó que este aumento estaría en torno al 2%, aunque hasta dentro de unos días no se tendrán datos más concluyentes. Las estimaciones son que incluso podría estar algo por encima de ese porcentaje y que se llegaría a los 4,4 millones de viajes hechos por los usuarios del transporte urbano.

Es el segundo año seguido en el que se ganan viajeros después de once años perdiéndolos. En 2004 se alcanzó el máximo histórico del servicio con 6,1 millones. Desde entonces bajó todos los años hasta los 4.244.885 de 2015. El año siguiente ya se cerró con 4.291.685 y en 2017 se habría llegado a los 4,4 millones. Más usuarios conlleva más ingresos y que no se incremente el déficit del servicio, cuya tarifa no financia todos los gastos y es el ayuntamiento el que cubre las pérdidas.

Nevado adelantó los datos de 2017 durante la presentación de los dos nuevos vehículos que entrarán en servicio el próximo lunes. Su adquisición es resultado de las modificaciones que se aprobaron en otoño de 2016 y que entraron en servicio el pasado verano. Con estos cambios se hizo necesario contar con un nuevo vehículo por la creación de la línea de refuerzo que conecta Mejostilla con la Universidad Laboral y el campus y con otro para la nueva línea surgida de la unión de la 4, 9 y 40. Con estos dos vehículos, el servicio pasa a contar con 35 autobuses (6 de 18 metros y 29 de 12) y 2 microbuses.

MESA DEL TRANSPORTE / Nevado fue ayer más propensa a que se vuelva a reunir la Mesa del Transporte. En su anterior visita a la estación de los autobuses urbanos no se mostró a favor. La reapertura de la mesa, en la que participan vecinos, técnicos y políticos, la ha pedido la agrupación de asociaciones de vecinos para introducir nuevas modificaciones planteadas por el colectivo vecinal. El grupo municipal socialista ya ha solicitado que este órgano, que no se convoca desde 2016, vuelva a reunirse.