El autor del crimen cometido en La Madrila hace hoy un año, buscando conseguir una reducción de su posible condena, ha intentado, sin éxito, llegar a un acuerdo con la familia del joven al que en la madrugada del día de Reyes del 2005 causó la muerte de un disparo.

El acuerdo que buscaba la defensa del acusado se refiere a la calificación de los hechos. Por la muerte del joven estudiante de Derecho Alejandro Clemente, tanto el fiscal como la acusación imputan a Alejandro Martín Niño un delito de asesinato, y el ofrecimiento que la defensa del acusado ha hecho al abogado de la familia es el de cambiar la calificación de asesinato por la de homicidio, con grado de superioridad. Esto significaría una reducción de 5 años en la condena, ya que la pena máxima por el delito de asesinato es de 20 años --pena que solicitan el fiscal y la acusación--, mientras que por el de homicidio son 15 años.

Fuentes cercanas a la familia confirmaron a EL PERIODICO que por parte de la defensa "ha habido un ofrecimiento para un posible acuerdo, han ofrecido en concreto 60.000 euros a cambio de aceptar una calificación de homicidio, en lugar de asesinato, y evidentemente hemos dicho que no". El intento de acuerdo se ha desestimado y la acusación particular, ejercida por la familia del fallecido, mantendrá su acusación de asesinato y la petición de la pena máxima, 20 años de prisión.

JUICIO Y PENAS De haberse aceptado llegar al acuerdo, éste se le habría trasladado también al fiscal, y de llegarse a acuerdo por todas las partes Alejandro Martín Niño habría sido condenado en el mismo momento del juicio y sin practicarse prueba alguna en la vista oral.

Estos tipos de acuerdos son factibles dentro de la legalidad. Las partes --defensa, acusación y fiscal-- acuerdan los hechos, condena e indemnizaciones por responsabilidad civil, éstos se trasladan al presidente del tribunal y en el mismo acto del juicio se dicta sentencia. Pero como en este caso la familia del fallecido ha rechazado el acuerdo, Alejandro Martín Niño se sentará el próximo día 24 en el banquillo de los acusados. Será juzgado por los delitos de asesinato y tenencia ilícita de armas en la Sección Segunda de la Audiencia.

Los hechos por los que será juzgado ocurrieron sobre las 03.00 horas del 6 de enero del 2005 en la plaza de Albatros, en la zona de la Madrila baja. El acusado mantenía una discusión con su compañera sentimental y madre de su hijo y un grupo de jóvenes le increpó para que no la agrediera, momento en que ella aprovechó para marcharse. Según la calificación que de los hechos hacen el fiscal y el abogado de la acusación, tras este suceso Alejandro Martín volvió a casa en su coche, cogió una pistola, volvió en taxi a la Madrila y desde las escaleras que comunican Doctor Fleming con la plaza de Albatros llamó a los jóvenes y disparó contra ellos, alcanzado una de las balas a Alejandro Clemente, que murió por shock hemorrágico. Por su parte, la defensa del acusado mantiene que éste no fue a casa a por la pistola, que la llevaba encima y que los disparos que efectuó contra los jóvenes "desgraciadamente alcanzado uno de ellos a Alejandro Clemente" fueron intimidatorios y para defenderse.

El fiscal y la acusación imputan a Alejandro Martín los delitos de asesinato y tenencia ilícita de armas, y piden para él una pena total de 22 años de prisión así como el pago de 170.000 y 250.000 euros, respectivamente, de indemnización para la familia del fallecido.

Para la defensa los hechos son constitutivo de los delitos de tenencia ilícita de armas e imprudencia temeraria, y de forma alternativa a éste, un delito de homicidio con aplicación de eximentes o atenuantes como trastorno mental transitorio, obcecación, legítima defensa, confesión y consumo de alcohol y hachís. Pide la absolución y, de ser condenado, las penas mínimas.