El estudio informativo de la autovía Cáceres-Trujillo tiene fecha de julio del 2001. Seis años después aún no se ha abierto al tráfico ninguno de los 4 tramos en los que se han dividido sus 47 kilómetros para su construcción. El que está más avanzado es la variante de Trujillo, que podría estar terminado a finales de este año por el estado que presentan los trabajos. Aunque todos los tramos ya están adjudicados, sus últimos once kilómetros, de Santa Marta de Magasca a Cáceres, aún no se han iniciado y se prevé que se empiece tras el verano. Si todos los plazos se cumplen, los 47 kilómetros estarían operativos a final del 2009 o en el 2010. Sobre la fecha de apertura de la variante de Trujillo, el Ministerio de Fomento, al que se dirigió este diario en la mañana de ayer, no dio durante todo el día ninguna fecha ni previsión sobre su entrada en servicio.

El estudio informativo es de julio del 2001. La declaración de impacto ambiental se publicó en el BOE en junio del 2003. La resolución de Fomento que aprueba el estudio informativo es de 8 de julio del mimo año. La licitación del proyecto del primero de los tramos (la variante de Trujillo, partiendo de la A-5) se publicó en diciembre del 2003, y así sigue un largo proceso de expropiaciones, ocupaciones, concursos y adjudicaciones hasta el 30 de marzo del año 2007.

Ese día se informó por parte del Ministerio de Fomento que la Sociedad Estatal de infraestructuras de Transporte Terrestre decidió en una reunión celebrada un día antes adjudicar la construcción del último tramo de la autovía, de Santa Marta de Magasca a Cáceres, que es el único que aún no se ha iniciado, posiblemente la obra empezará en septiembre, y que tiene un plazo de ejecución de veintiún meses, por lo que si se cumple, será a finales del 2009 o ya en el 2010 cuando se pueda circular por todo el trayecto entre Cáceres y Trujillo por la nueva autovía.

PLAZO CUMPLIDO El Ministerio de Fomento sacó a concurso el primer tramo de la autovía el 28 de septiembre del 2005 con un presupuesto de licitación de 30,7 millones de euros y con un plazo de ejecución de 30 meses para los 9,5 kilómetros que circundan Trujillo y que conectarán la A-5 con la nueva autovía (A-58).

La obra de este tramo se adjudicó en enero del 2006 con una baja importante, al acordarse su contratación con Corsan-Corviam por un importe de 18,4 millones. Ese plazo oficial de 30 meses se cumplirá, ya que la estructura de la obra está prácticamente finalizada (solo quedaría la conexión con la A-5), se está trabajando en el firme y asfaltado de la vía y restaría la señalización por lo que se aprecia de los trabajos que se están realizando. La obra, si no hay imprevistos, podría estar lista a final de año.

Los otros tres tramos se adjudicaron en julio del 2006 (Trujillo-Plasenzuela, de 12,5 kilómetros, por 31 millones) y en marzo del 2007 los otros dos (Plasenzuela-Santa Marta, por 32,5 millones y con otra significativa baja, ya que el precio de licitación era de 50,4, y el mencionado entre Santa Marta y Cáceres, de 11 kilómetros y con un presupuesto de adjudicación de 23 millones).

Este último tramo conecta con la entrada a Cáceres por la glorieta del centro penitenciario, pero seguirá en un futuro dado que la Secretaría de Estado de Infraestructuras sacó en diciembre la licitación del contrato de consultoría para las alternativas de conexión entre las autovías de Trujillo y de la Plata. De este asunto se habló en la reunión que el miércoles día 1 mantuvieron el secretario de Estado de Infraestructuras y el consejero de Fomento, José Luis Quintana, que tras la entrevista afirmó que el estudio informativo está pendiente de adjudicarse y que esa conexión se hará bordeando Cáceres por su sureste. El ayuntamiento quiere que coincida con la ronda este y sur.