Alrededor de 3.500 usuarios cacereños resultaron afectados por el corte de energía eléctrica que se produjo en la noche del pasado jueves y que afectó fundamentalmente a la barriada cacereña del R-66, sobre todo a la zona cercana a la avenida Alfonso Díaz de Bustamante.

Según confirmaron fuentes de Iberdrola a este periódico el problema se detectó en torno a las 04.10 horas en un cable subterráneo situado entre los centros de transformación de Telefónica y el Perú III.

Las mismas fuentes indicaron que una hora y nueve minutos después se localizó el punto de la avería y el cien por cien de los clientes ya tenían suministro.

El apagón no sólo afectó al R-66, también tuvo importantes consecuencias en la jefatura de la Policía Local, situada junto a la estación de Renfe. Según indicaron algunos agentes, las dependencias policiales estuvieron sin suministro buena parte de la noche y hubo problemas con los ordenadores. El parte de incidencias de la policía da cuenta de la avería.

El último apagón importante que se produjo en la ciudad tuvo lugar en el mes de febrero. Afectó a 3.000 familias del noroeste de la ciudad, muy especialmente a los barrios de El Vivero, R-66, Los Castellanos y Parque del Príncipe. Empresas como MacDonalds y el Hotel Barceló V Centenario también resultaron perjudicadas. El incendio de una torreta de Iberdrola fue la causa del problema.