El parque del Príncipe se lleva más de un tercio de la inversión pedida a la UE dentro del proyecto Agora, el quinto que firma el alcalde, José María Saponi, esta semana. Para afrontar la ampliación de esta zona verde y la adecuación del auditorio del parque hay 1,3 millones del total de 3,3 del proyecto. Su inclusión no significa que se vaya a realizar esta inversión, ya que las posibilidades de conseguir en el reparto de los fondos europeos todo lo solicitado no son muchas. Pero sí es un primer intento por añadir al parque terrenos cuya consecución han provocado una significativa merma en la economía de la institución municipal, al verse obligado a obtenerlos al estar calificados como urbanos para espacios verdes, situación que no se repetirá cuando entre en vigor el nuevo plan de urbanismo.

La partida destinada en un principio a esta ampliación era algo superior, de más de dos millones, pero se recorta al repartirse la inversión prevista con otras intervenciones, entre las que destaca la remodelación del Paseo Alto, actuación anunciada en otras ocasiones por el ayuntamiento, pero que no se llega a concretar por falta de fondos.

El Paseo Alto ocupa una superficie inferior al parque del Príncipe (casi cuatro hectáreas del primero por las veinte del segundo sin la ampliación), pero es una de las zonas verdes más antiguas de Cáceres que apenas se ha renovado en las últimas décadas. El objetivo es acondicionar el cerramiento, pavimento y caminos, poner nuevas plantaciones, ahora hay eucaliptos, y dotarlo de riego y juegos infantiles. El coste es de 603.000 euros.

ANTECEDENTE El parque del Príncipe se inició con Carlos Sánchez Polo y se impulsó con José María Saponi, pero todavía queda por ampliarse en casi ocho hectáreas, en un prado metido dentro del casco urbano y donde ahora pastan las vacas.

El consistorio ha obtenido más de dos tercios del terreno de la ampliación. En 2001 consiguió 4,4 hectáreas tras un acuerdo con los propietarios y se pagó con metros cuadrados edificables en parcelas municipales que se valoraron en 3,5 millones de euros. Otras dos hectáreas las adquirió en 2003 y el jurado de expropiaciones fijó el justiprecio en 655.000 euros, pero su precio final no está cerrado, ya que el TSJEx ha cifrado su coste en 6,3 millones de euros. Es el parque que más va a costar al ayuntamiento tras sumar el precio de la obtención del suelo. En el Rodeo el coste fue más social que económico, ya que se redujo el tamaño inicial de la zona verde a cambio de la obtención de casi la totalidad del terreno.

Aunque lo que queda por conseguir de la ampliación del parque es menos de un tercio, no es previsible que se repita lo ocurrido, ya que con el nuevo plan de urbanismo se adscribe la obtención del suelo a los sistemas generales (de cesión obligatoria al ayuntamiento) de los nuevos polígonos residenciales.

Ahora el consistorio, en la que se puede calificar como la semana portuguesa ya que en los cinco proyectos participan ciudades lusas, busca dinero en Europa para ir acondicionado el espacio de la ampliación del parque del Príncipe, que sin el terreno que se tiene que añadir ya es el parque urbano de mayor tamaño.