Al menos cinco locales de copas de La Madrila baja siguen reabriendo a partir de las 5.30 horas aprovechando el fraude de ley que permite a los establecimientos con categoría c (cafés, bares, cafeterías y restaurantes) volver a hacerlo cuatro horas después del cierre, fijado a las dos de la madrugada, según la orden de la Junta del año 96 que regula los horarios de apertura y cierre. Ayuntamiento, hosteleros y vecinos han confirmado a este diario este extremo que, según la asociación de vecinos La Madrila, provoca molestias "por el ruido de la gente que sigue en la calle y por la música de estos locales", asegura su presidente, Miguel Salazar. "Algunos reabren y otros ni cierran", denuncia el veterano dirigente vecinal.
Sin embargo, el concejal de Seguridad Ciudadana, Carlos Jurado, niega que los establecimientos "estén abriendo y cerrando a la hora que les da la gana", aunque admite que el horario se ha ampliado para facilitar el desalojo escalonado de los locales a partir de las tres. "Los dos problemas de La Madrila son los niveles de ruido y los bares que reabren a partir de las cinco y media", afirma el edil, que calcula que "son cinco o seis". Advierte de que la ordenanza del ocio, aprobada en noviembre pasado y en fase de alegaciones, será "muy restrictiva" con estos locales, "ya que solo se les permitirá lo que a cualquier bar de tapas: un televisor y se acabó".
Jurado, que prevé que la normativa entre en vigor este mes, deja claro que los que operan como afters "son bares que no pueden tener música a un determinado número de decibelios ni servir determinadas cosas. Se va a actuar contra los establecimientos que no cumplen las condiciones de su licencia. Si reabren a esa hora, tienen que hacerlo con unas condiciones muy cerradas que no regulaba la anterior ordenanza", subraya.
MEDIDAS JUDICIALES Salazar recuerda que el ayuntamiento se comprometió con ellos a que los bares que incumplen los horarios "se iban a cerrar y que, con la nueva ordenanza, se tendrían que insonorizar". Sin embargo, apunta, "el próximo mes de julio se cumplirán seis meses desde que se aprobó la ordenanza", sin que haya habido soluciones. "Les dimos ese plazo. Si a partir de entonces no cumplen, tendremos que ir a los tribunales", asegura este portavoz, que valora positivamente los cortes de tráfico de la policía local en los accesos a la plaza de Albatros para evitar los ruidos desde los jueves y durante los fines de semana.
Esta medida, que comenzó a implantarse en noviembre del año pasado, ha servido, según Jurado, "para que el ruido se reduzca en un 50%", tal y como le ha comunicado el colectivo vecinal de La Madrila. El concejal admite que "no se está obligando a cerrar a todos los locales a la
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