El ayuntamiento no continuará con la tramitación del expediente para la construcción y explotación de un complejo deportivo y de ocio en el R-66. La iniciativa, que se conocía como la 'Ciudad del Padel', se desestima porque no se ajusta al plan general de urbanismo ni al plan especial que presentó la empresa promotora con el aprovechamiento urbanístico del terreno. La decisión de dar por desestimada esta iniciativa se reiteró en la junta local de gobierno que se celebró el pasado 1 de julio, un acuerdo que refrendó una diligencia anterior de febrero, en la que el concejal de Urbanismo dio por archivadas las actuaciones de este expediente.
La primera vez que se planteó la posibilidad de hacer un centro deportivo en las inmediaciones del R-66 fue en 2009 cuando un grupo de aficionados al padel presentó una alegación a la revisión del plan de urbanismo. Se desestimó por la inviabilidad de desarrollarlo en el sitio propuesto (en los terrenos de la ampliación del parque del Príncipe) porque es una zona verde.
Pero de esta alegación partió la opción de ubicarlo en dos parcelas del ayuntamiento que están entre la calle islas Cíes y el camino de Hinche, suelo que por su calificación (se destina a equipamiento) sí podía acoger un centro deportivo, incluso para facilitar el desarrollo de esta iniciativa el ayuntamiento cambió el uso de una de las dos parcelas que se pretendían ocupar, que pasó de tener un fin educativo a otro deportivo, con lo que se contaba con una superficie total de 2,1 hectáreas para la construcción de la 'Ciudad del Padel'.
ESTUDIO DE VIABILIDAD Los promotores, que constituyeron una sociedad (Padelonia), llegaron a entregar en abril de 2012 un estudio de viabilidad en el ayuntamiento, que era el paso previo a la convocatoria de un concurso para que esta empresa y cualquier otra interesada se presentasen a la licitación para la construcción y explotación de un complejo deportivo que inicialmente se proyectaba con catorce pistas de padel y con un edificio de uso terciario (comercio al por menor, oficinas, ocio...). Se trataba de promover una iniciativa de recreo parecida a la que se desarrolla en el barrio del Perú con el centro deportivo y de ocio que hay en esta zona de la ciudad.
El estudio de viabilidad no se admitió, dado que para cambiar los parámetros urbanísticos de las dos parcelas se tenía que presentar por los promotores un plan especial, algo que hicieron en 2013. En dicho plan se proponía una edificabilidad máxima de 14.423 metros cuadrados, de los que el 75% se destinaban a usos deportivos y el 25% restante a fines terciarios.
La edificabilidad que se planteaba en el plan especial era superior a la del primer estudio de viabilidad que entregaron los promotores, por lo que, según el informe que elaboró la secretaría general del ayuntamiento, era necesario que los promotores presentaran un nuevo estudio de viabilidad en el que se justificase el mayor aprovechamiento urbanístico que se sugería en el plan especial. En febrero de 2016 Urbanismo acordó archivar el expediente, una decisión refrendada en julio por la alcaldía y la junta local de gobierno.
