El ayuntamiento exigirá a Placonsa que agilice las obras del edificio Embarcadero para que estén acabadas antes de final de año. La alcaldesa Carmen Heras tiene previsto mantener la próxima semana una reunión con responsables de la constructora extremeña, a los que transmitirá su inquietud por la marcha de las obras. Así lo avanzó ayer la regidora, que mostró la "preocupación" del gobierno local por la actuación en la antigua nave minera, uno de los proyectos estrella del PP en la anterior legislatura que no pudo concluirse tras sucesivos retrasos.

Iniciado en agosto del 2004, el proyecto debería haberse completado a finales del 2006 con fondos europeos del programa Urban en un 75% y el resto del consistorio. Las deficiencias detectadas en la estructura de la bóveda obligaron a aumentar en casi 600.000 euros el presupuesto inicial de 4,2 millones de euros. También fue necesario excavar casi tres metros y medio en la superficie del edificio al encontrarse roca caliza con componentes de hierro y descartarse las microvoladuras para no afectar a la estructura de la nave.

Con este historial, los plazos de ejecución se ha ido alargando en el tiempo sin que la obra haya podido inaugurarse aún. En abril del 2006 el concejal Francisco Javier Castellano afirmó que estaría abierto en febrero de este año como centro para diferentes usos. No fue posible. La siguiente fecha, fijada para julio pasado, tampoco se ha cumplido. La última, ofrecida en abril de este año por la empresa al ayuntamiento, establece octubre próximo como la más probable para la conclusión de la rehabilitación. Ayer, a instancias de este diario, fuentes de Placonsa no pudieron confirmar si se mantiene este mismo plazo de finalización debido a que sus directivos se encuentran de vacaciones.

MAS INFORMACION Sin embargo, Heras ha preferido no esperar y aprovechar el encuentro solicitado por los responsables de esta actuación para que este compromiso de ejecución se cumpla y no haya nuevas dilaciones. "Es un proyecto de mucha envergadura que ha sufrido diferentes retrasos y que ha habido que revisar", reconoció ayer. Encima de la mesa estará toda la documentación del proyecto y, con el asesoramiento del concejal de Fondos Europeos, Víctor Santiago Tabares, la alcaldesa quiere conocer "el grado de actuación y lo que falta para terminar". También aprovechó para recordar que este asunto tuvo "mucho tira y afloja en la legislatura" y provocó la dimisión del entonces viceportavoz del gobierno municipal del PP, Francisco Javier Castellano.

Asimismo, apuntó que la obra "ha tenido muchos problemas" y que su intención "es verlo detenidamente desde el punto de vista del proyecto, de los presupuestos y de las certificaciones que se han hecho y que faltan". Heras reiteró que, "cuando tenga claro" todos estos datos, "podrá dar una información más completa y mucho más real".

El plan para la recuperación de este inmueble, uno de los símbolos de la arquitectura industrial de Aldea Moret, prevé la realización de cuatro edificios: tres dentro de la nave y otro en el exterior. Los interiores se destinarán a usos formativos, culturales y medioambientales, y la construcción de una torre fotovoltaica junto a la nave minera. Las bases de las estructuras de estos nuevos edificios se han levantando por debajo del actual nivel del suelo.