El ayuntamiento y la Junta no tienen interés en hacerse con la cesión del edificio de la cárcel vieja, cuyo futuro se complica y estaría abocado a seguir deteriorándose. La Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios (Siep) sacó hace un mes este edificio de la lista de inmuebles que tiene a la venta para la consecución de fondos y su inversión en la construcción y equipamientos de centros penitenciarios. La Siep tiene el edificio desde 2010 y desde entonces no se le ha dado una utilidad. Para que tuviese una salida se decidió ofrecerlo a las dos administraciones que han mostrado interés, el ayuntamiento y la Junta, que ahora confirman que no quieren la cesión.
El que ha estado más cerca es el ayuntamiento. Su junta local de gobierno acordó en marzo de 2016 solicitar a la Siep su cesión, incluso se redactó un informe sobre posibles usos y costes de adecuación para su utilización para fines administrativos y socio-culturales. Se calculó un gasto de 12 millones, lo que llevó al ayuntamiento a rectificar su solicitud de cesión, que quedó condicionada a que antes se realizase un estudio de viabilidad. La conclusión es que el ayuntamiento «no puede asumir la cesión por la importante cantidad que supone, por la situación de las arcas municipales y por la necesidad de atender otras prioridades», según se informó desde el consistorio el pasado 9 de enero, una postura que se mantiene, según se detalló el lunes por la entidad local.
Desde la Junta se explicó el pasado día 16 que la única que se ha interesado es la Consejería de Cultura, «no ha habido ninguna otra solicitud en referencia a este edificio por parte de la Junta». Desde Cultura se aseguró el pasado día 25 que el único interés está relacionado con la declaración de Bien de Interés Cultural que ha pedido la Asociación Memorial en el Cementerio de Cáceres.
«El pasado 27 de noviembre se recibió una petición en la que se solicitaba que la cárcel vieja se declarase Bien de Interés Cultural, a partir de ese momento los técnicos de Patrimonio comenzaron a valorar la oportunidad de incoar expediente, proceso en el que actualmente se está», se apuntó desde Cultura. En cuanto a la posibilidad de hacerse con la cesión del edificio, la respuesta de la consejería fue clara: «no existe interés alguno».
El edificio está destinado a equipamiento en la normativa urbanística. Entre los usos permitidos están: administrativo, social, cultural, docente y asistencial. Es un inmueble que está en el catálogo de bienes protegidos de Cáceres con protección estructural. Hasta el actual plan de urbanismo, en vigor desde 2010, se permitía el derribo del edificio y la construcción de pisos. La parcela ocupa una hectárea y la edificabilidad del edificio es de 11.040 metros cuadrados.
