El ayuntamiento atenderá de forma especial las inmediaciones de Fuente Fría ante lluvias intensas, a fin de retirar la suciedad que se acumula en la zona, procedente de pequeños torrentes que bajan de la ladera de la Montaña. El concejal de Infraestructuras, Miguel López, ha reconocido que en la zona "hay un problema con la lluvia" porque se anega con facilidad cuando cae de forma intensa.

El edil, que recorrió la zona con el presidente de la asociación de vecinos, Juan Burgos, achaca este problema a la orografía del terreno, que provoca que tanto la suciedad y el lodo que baja por la ladera, como la que arrastra el río, se estanque en la fuente, tal y como ya se habían quejado los vecinos.

En todo caso, advierte de que no se puede instalar ningún dique o mecanismo similar en la zona para detener el paso del agua, puesto que esto podría resultar peligroso, por lo que "se atenderá a la limpieza de la zona" para retirar los restos cuanto antes cuando se inunde. De hecho, hace quince días, un equipo de Conyser retiró de la fuente la suciedad que se había acumulado tras las últimas lluvias.

CANALIZAR EL LODO Lo que sí se hará es una canalización para encauzar el agua y barro que baja de San Marquino y la Montaña con la lluvia "para que esta suciedad caiga directamente al río y no a la fuente", explicó el responsable de Infraestructuras.

Además, para ampliar el cauce del río se llevará a cabo otra actuación que permitirá retirar la maleza de ambos márgenes. Esta intervención se ha incluído en el convenio que el ayuntamiento ha firmado esta semana con la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), que proyecta una actuación mucho más amplia en toda la ribera. La intervención de limpieza en este tramo de El Marco, podría iniciarse en el plazo de un mes.

Del diseño y habilitación del canal que encauzará el agua de lluvia que baja de la Montaña, se ocuparán los servicios municipales. Estos mismos servicios se ocuparán también de mejorar la seguridad en el margen derecho del camino que sube desde Fuente Fría hacia la Montaña, que utilizan muchos cacereños a diario para subir al santuario. Lo que se hará allí es prolongar la valla de madera que se instaló un poco más abajo hasta un cercado que hay justo después del tramo peligroso del camino, que transcurre paralelo al río con un desnivel de dos metros de altura.

En todo caso, no hay plazo previsto para estas actuaciones, y las que eliminarán los graffitis , que se irán llevando a cabo "en la medida en que pueda ir haciéndolo la brigada de obras", explicó López.