El ayuntamiento reforzará su apoyo al festival de cine de Cáceres que organiza Rebross. El alcalde, Luis Salaya, puso de manifiesto ayer el compromiso municipal con las iniciativas que desarrolla la fundación cultural en la capital cacereña tras un encuentro que mantuvo con su director, Paco Rebollo, dentro de la ronda de contactos que mantiene el nuevo regidor con colectivos de la ciudad. Estuvo presente también la concejala de Cultura, Fernanda Valdés.
En el encuentro, se puso sobre la mesa la situación que atraviesa la cultura en la ciudad y las actividades que desarrolla la fundación como la revista especializada Versión Original y la organización de los San Pancracios. En ese sentido, el alcalde destacó la aportación de los Rebross al marco cultural local y la proyección nacional de Cáceres que se consigue con la celebración del festival de cine. «Han puesto en el mapa del cine a nuestra ciudad, tienen un proyecto tremendamente interesante que este equipo de gobierno valora y que aporta muchísimo a la cultura y a la solidaridad», defendió Salaya, que valoró el encuentro de forma «positiva» e insistió que ambos mantendrán líneas de colaboración de cara al futuro de la legislatura. «Vamos a seguir trabajando juntos», concluyó el regidor a través de una red social. Este diario se puso en contacto también con la fundación Rebross para conocer una valoración sobre la reunión pero no atendieron las llamadas de este diario.
Cabe recordar que el festival solidario de cine se celebra en la ciudad desde hace 26 años y mantiene el mismo formato de los últimos años con proyecciones de la sección oficial en los multicines, actividades paralelas y una gala de clausura donde se entregan las estatuillas de los San Pancracio a los profesionales más destacados del sector ese año. Fue en 2007 cuando oficialmente adquirió el apodo de solidario y en 2008 fue galardonado con el premio González Sinde de la Academia de las Artes cinematográficas. En los últimos años, la fundación ha recriminado a las instituciones su falta de apoyo y apuesta por el festival. Lo cierto es que este último año la cita que organizan los Rebross contó con 75.000 euros, de los que 55.000 fueron de ayudas públicas y patrocinadores. En cuanto a la aportación municipal, recibió en 2018 la cantidad más elevada de las ayudas culturales, 6.000 euros, aunque en 2019 peligró la subvención porque la falta de presupuesto obligó a prorrogar las cuentas del año anterior y esa partida se quedó sin financiación.
