El suelo urbanizable, los espacios que se reservan para la construcción de los nuevos polígonos residenciales, va desarrollándose poco a poco. De los nueve previstos, seis ya se están tramitando y el séptimo pasó ayer por la comisión local de Urbanismo, que informó a favor de la viabilidad de este sector, que se denomina residencial Nueva Ciudad y que va a completar la trama urbana por el norte. Es sólo un primer paso, ya que para la construcción de las 709 viviendas previstas todavía falta más de un año.

El nuevo polígono es el segundo, el primero fue el residencial Maltravieso, de los sectores en suelo urbanizable que se tramita desde su inicio en función de la Ley del Suelo de Extremadura, lo que supone que al menos el 25% del aprovechamiento de uso residencial del polígono deberá dejarse para viviendas sujetas a un régimen de protección pública. Esto ampliará la oferta de vivienda a un precio máximo tasado.

La consulta sobre la viabilidad de este nuevo residencial se presentó en el consistorio a nombre de Juan Muñoz, que es directivo de Aesa, una de las empresas con propiedades en este sector, en el que se pueden edificar viviendas en bloque, con cuatro alturas, y unifamiliares de dos plantas.

PROCESO A SEGUIR El concejal de Urbanismo, Andrés Nevado, señaló ayer que el dictamen de la comisión de respaldar la viabilidad del nuevo residencial deberá ser aprobado por el pleno, para después publicar el acuerdo, "iniciándose un plazo de dos meses para la presentación del programa de ejecución", un documento base para el posterior desarrollo del residencial. El edil confirmó que ya se ha presentado en el consistorio para su traslado a la comisión de Urbanismo la consulta de viabilidad de otro de los sectores aún pendientes; este polígono, con un potencial de 695 viviendas, se tiene que desarrollar entre la prisión vieja y la fábrica textil de Induyco.

Sólo hay un sector, el 2.5, cuya realización podría dejarse para la revisión del PGOU. Del resto, a pesar de que están en trámite, sólo se ha empezado a construir un porcentaje mínimo del total de los pisos previstos.