El Banco de Alimentos alerta de la necesidad de productos frescos y perecederos y anuncia que después de verano iniciará una campaña para proveer a las familias necesitadas y colectivos sociales de estos alimentos.

Según indicó ayer el presidente del Banco de Alimentos, Juan Carlos Fernández Rincón, la idea es dedicar parte de las donaciones económicas a comprar productos perecederos y para ello han pensado en contactar con empresas alimentarias de la zona de Montánchez y Miajadas. El inconveniente de estos alimentos, señaló Fernández, es que el Banco de Alimentos carece de cámaras frigoríficas, por lo que el reparto de los productos frescos deberá hacerse el día que se recibe, igual que sucede actualmente con la fruta.

La escasez de carne y pescado, según el presidente del Banco de Alimentos, "se ha dado siempre", debido a que las campañas de recogida suelen realizarse de productos no perecederos. Tal y como adelantara este diario, el comedor social de las Hijas de la Caridad aseguró que el principal problema ahora se centra en preparar los segundos platos del menú diario, del que comen una media de 60 personas.

EL 0,7% DEL PRESUPUESTO Precisamente ayer, el presidente del Colegio de Dentistas de Extremadura, Joaquín de Dios, hizo entrega al Banco de Alimentos de un cheque por un importe de 1.600 euros (el 0,7% del presupuesto del colectivo), que serán destinados a niños con necesidades alimenticias especiales. Al acto de entrega asistió también la alcaldesa, Elena Nevado, y la concejala de Asuntos Sociales, Marisa Caldera. Tras la donación del cheque se realizó una visita a los almacenes del Banco de Alimentos de Aldea Moret.